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Les Années folles

Entre los países de la OCDE, Francia destina 14 por ciento de su PIB a pensiones. A todas luces es insostenible y se ha convertido en un lastre para el desarrollo

OPINIÓN

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CASABLANCA, Marruecos. Todas las acciones de gobierno tienen consecuencias electorales. En Francia, el paro nacional generado por la aspiración del presidente Emmanuel Macron para transformar el sistema de pensiones puede poner en riesgo la viabilidad de un proyecto político anti populista. Macron tiene la intención de simplificar un enramado que comprende más de 40 planes de jubilación diferentes, entre públicos y privados.

El país se encuentra paralizado y la capital francesa increíblemente vacía. Sólo dos de las 16 líneas del metro están en funcionamiento. El tren que atraviesa el país incluido el TGV tampoco opera con normalidad. Una parte sustancial de los trabajadores sindicalizados se opone a que se eleve la edad de retiro (para los maquinistas es de 52 años) y el porcentaje de sueldo con el que lo hacen (que llega hasta 75 por ciento). La gestación del régimen actual puede rastrearse al siglo XVII y se intensificó después de la guerra por el pragmatismo político y de reconstrucción nacional del presidente De Gaulle. Sin embargo, al día de hoy, entre los países de la OCDE, Francia destina 14 por ciento de su PIB a pensiones (el más alto de un país europeo y el doble que Estados Unidos, por ejemplo). A todas luces es insostenible y se ha convertido en un lastre para el desarrollo. La apuesta de Macron radica en eliminar prestaciones y bajar impuestos.

No obstante, el Presidente francés se enfrenta a atavismos socialistas y al populismo encarnado por los Le Pen y su Front Nationale, a la derecha; así como a Jean-Luc Mélenchon de La France Insoumise, a la izquierda. De acuerdo con el índice de riesgo político de la Coface, Francia es el segundo país más populista de Europa después del Reino Unido. El discurso de los políticos franceses en los extremos del espectro ideológico contiene elementos similares al republicanismo de Trump y al populismo de AMLO, como la xenofobia, la supresión migratoria y el embate en contra de las élites empresariales.

La agenda programática de los Le Pen gira en torno a la recuperación de cuatro soberanías: monetaria, legislativa, presupuestal y territorial. Es decir, liberar a Francia de la Unión Europea, limitar la migración, el combate al multiculturalismo y privilegiar medidas proteccionistas. A la izquierda, Mélenchon se encuentra en la misma línea que el Syriza griego, el Podemos español y Morena en México. Desde la izquierda los políticos hablan en nombre del “pueblo” mientras que desde la derecha se dedican a despertar temores por la migración y el terrorismo. En cualquier caso, ambos bandos apuestan por soluciones políticamente rentables, pero técnicamente inviables y moralmente iliberales. ¿Saldrá Macron avante de esta crisis? Alain Juppé fracasó, Jacques Chirac venció. El resultado ahora no es evidente, pero las tensiones en Irán sólo agravarán la situación.

POR ALEJANDRO ECHEGARAY
CONSULTOR
@AECHEGARAY1

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