Hace algunos días, cuando el asesinato del otrora candidato presidencial, Luis Donaldo Colosio, cumplió 25 años, un trending topic inundó mi timeline: ¿dónde estabas cuando mataron a Colosio? La mayoría, contemporáneos, respondieron que estaban realizando alguna actividad infantil y otros, mayores, en shock. Lo interesante de este asunto es que aquel marzo de 1994, fue un parteaguas colectivo, un momento de irrupción mediática, política y social para toda una generación. Un episodio que jamás olvidaremos.
Era lógico que una serie sobre su vida fuera inminente, y hace algunos días, Netflix lanzó Historia de un crimen: Colosio, que consta de ocho capítulos y que entra en el rango de: “Qué ver cuando estás enfermo y no puedes salir de tu casa un domingo”.
Historia de un crimen: Colosio se basa en un par de líneas argumentales: durante la primera, conocemos la vida privada y pública del candidato, su relación con otros miembros del PRI, quienes, de una forma u otra, le advierten/amenazan sobre su distanciamiento con el partido político, hasta la tarde fatídica en Lomas Taurinas. La segunda, la investigación de la policía local y federal para dar con el asesino o, en su caso, de confirmar que Mario Aburto fue el autor intelectual del crimen.
¿Cuál es el objetivo de HDUC:C? Si era indagar en el canon de las conspiraciones, lo cumple a medias; no me refiero a que la serie fuera un documental periodístico, pero el guion se queda en un terso nivel que, para bien o para mal, está presente en el colectivo popular: un golpe interno, probablemente, orquestado por el mismo Salinas de Gortari.
Ahora, la parte más relevante sobre un programa de televisión: el entretenimiento. HDUC:C, parece que salió de una fábrica que elabora series genéricas sobre protagonistas históricos. De antemano nos enfrentamos a un ejército de personajes unidimensionales que no logran que la serie se sienta más allá de adaptar una entrada de Wikipedia. En términos muy burdos, los “malos” son muy malos y sabes que jamás van a cambiar.
A diferencia de otra serie mexicana sobre otro acontecimiento que marcó al país, Un extraño enemigo, los protagonistas recurrían a diferentes matices en su accionar y psique para engancharnos y sentirnos partícipes de la narrativa: nos identificabamos con sus ambiciones y temores; los capítulos cerraban con efectivos cliffhangers para querer ver el siguiente episodio. En HDUC:C, sólo te resignas al morbo de saber qué tan involucrados estaban los Salinas, Zedillo o el PRI.
Claro, existen puntos favorables dentro de la serie, como la actuación de Ilse Salas como Diana Laura Riojas, viuda de Colosio (confirma que es una de las actrices más relevantes de la industria en los últimos años) o de Ari Brickman, cuyo tono de voz es demoniaca como Salinas (pero su maquillaje parece de una fiesta infantil de Halloween). Historia de un crimen: Colosio es un ejemplo de cómo existen buenas ideas coyunturales, pero sin intención… se quedarán perdidas en un catálogo de Netflix.
[caption id="attachment_493073" align="alignnone" width="1024"] LOCACIÓN. Los productores recrearon en su totalidad la colonia de Lomas Taurinas. Foto: Especial[/caption]
Por JOSUÉ CORRO
@JUSUE_CORRO