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El consejo y el gobierno

Si se ha de respetar la libertad individual y la propiedad privada, no se necesita un proyecto de nación

OPINIÓN

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  AMLO presentó el Consejo para el Fomento de la Inversión, el Empleo y el Crecimiento Económico, CFIECE, que encabezará el empresario Alfonso Romo, jefe de la Oficina de la Presidencia, y afirmó que se trata de sumar voluntades de los sectores público, privado y social, bajo la premisa de que se requiere de la unidad de todos, pues no se podrá aumentar el crecimiento económico sin la participación de los mexicanos en su conjunto. Sin duda alguna que el principal reto que enfrentamos en la economía mexicana es el de lograr un mayor crecimiento, es decir, una mayor producción de bienes y servicios, que es la variable con la que se mide el crecimiento, reto que no será fácil superar. Lo escribí en el último Pesos y Contrapesos. En México, en materia de crecimiento económico, podemos distinguir dos etapas. La primera, de crecimiento elevado, que abarca de 1934 a 1982, a lo largo de la cual el crecimiento promedio anual de la economía fue del 6.2 por ciento. La segunda, de bajo crecimiento, que comprende de 1983 a 2018, durante la cual la economía creció, en promedio anual, 2.3 por ciento, etapa que abarca ya 35 años, y que, así lo creen muchos economistas, se extenderá más tiempo. Todos los meses el Banco de México levanta la Encuesta sobre las Expectativas de los Especialistas en Economía del Sector Privado, entre cuyas preguntas se encuentra la siguiente: ¿Crecimiento promedio anual de la economía durante los próximos diez años (2020 – 2030)? La media de las 32 repuestas obtenidas en la encuesta de enero fue 2.38 por ciento, con un mínimo de 1.90 por ciento y un máximo de 3.0 puntos porcentuales. La labor del CFIECE, ¿será eficaz para lograr un mayor crecimiento de la economía, por lo menos del 4 por ciento, que es la meta que AMLO ha fijado para su sexenio? En buena medida ello dependerá de que se convenza al gobierno de reconocer plenamente, definir puntualmente y garantizar jurídicamente los derechos de los empresarios a la libertad para emprender y a la propiedad privada sobre los medios de producción, lo cual no debería ser problema, ya que AMLO dijo, en el primer discurso que pronunció después de su triunfo, que en su administración se respetará la libertad de empresa y que no habrá expropiaciones, libertad para emprender y propiedad sobre los medios de producción que, como lo he escrito en más de una ocasión, se ven amenazadas desde la Constitución (Art. 25 y 28), amenaza que hay que eliminar, para lo cual habría que modificar la Constitución, modificación que, si AMLO quiere, puede llevarse a cabo. ¿Será? No, por lo que esa amenaza, que arrastramos desde febrero de 1983, seguirá estando presente, haciendo de la mexicana una economía menos segura y confiable para invertir directamente, inversiones directas de las que depende la producción de satisfactores, y por lo tanto el crecimiento de la economía, la creación de empleo y la generación de ingreso.  

arturodamm@prodigy.net.mx

@arturodammarnal