Franceses y croatas disputarán el título de este Mundial; una justa que ha sido extraordinaria, donde se han tejido historias fantásticas, dramáticas, independientemente del nivel futbolístico que, según dicen los expertos recalcitrantes, ha venido a la baja; pienso que en el futbol actual, los sistemas tácticos, la preparación física y la estrategia, por mencionar sólo algunos de los factores, provocan un equilibrio de fuerzas entre las selecciones participantes; esto le da a los equipos menores la oportunidad de sorprender en un solo partido y avanzar; desafortunadamente estos mismos factores han limitado a los futbolistas virtuosos, y es ahí donde el futbol sin duda es diferente.
Pero un Mundial es más que partidos; es el envolverse en la bandera nacional, es sufrir y gozar por algo tan aparentemente banal, como lo es un juego de futbol, y ahí se suman los aficionados y no aficionados, pues todos ven a su selección como una representación importantísima en el contexto internacional: presidentes, primeros ministros; todos los estratos sociales de un país entero viven pendientes poco más de un mes, en el caso de los finalistas, o menos, si se despiden antes del torneo; esto realmente sólo lo provoca un Mundial de futbol. Ningún otro deporte en su Mundial provoca todo este mar de ilusiones, sueños cumplidos y no cumplidos, sufrimiento y pasión desenfrenada.
Esta Copa del Mundo, además, ha expuesto al mundo una realidad que en ocasiones se ha escondido: Rusia, el país todopoderoso en lo social, económico, político, industrial, militar, etcétera, abrió sus brazos al mundo, con una apertura fantástica, un nivel de organización, y una nación que queda como un ejemplo a seguir, por lo que ha sido este certamen en el país más grande del mundo; ahí queda en la historia como algo difícil de igualar. Ya lo dijo el hombre que manda en FIFA, Gianni Infantino: “Este Mundial ha sido memorable”, y lo calificó como “el mejor de la historia”.
Para la Final, en lo deportivo, Francia parte como el gran favorito; tiene mayor equilibrio en la calidad de sus líneas, y por algo es el equipo a nivel de selecciones más caro; sin embargo ya lo hemos visto: Croacia puede hacer gestas impensables; desde la fase de Octavos de Final ha necesitado ir al alargue (dos veces ganó en serie de penaltis, con Dinamarca y Rusia, y con Inglaterra le “bastó” el tiempo extra, al encontrar el gol del triunfo por conducto de Mario Mandzukic).
Para los jugadores que saltarán a la cancha, este partido les representa pasar a la historia; ¿quién o quiénes serán los héroes del domingo? Quizá los croatas Rakitic, Modric, Perisic, por mencionar a algunos; o quizá los jóvenes franceses encabezados por Kylian Mbappé, o su gran estrella Antoine Griezmann; los porteros Lloris y Subasic también pueden tener un papel fundamental en esta Gran Final.
Habrá héroes y villanos, alegria y tristeza. ¿Quién para Campeón del Mundo? Mañana lo tendremos, en un domingo que no es cualquier domingo; éste es el de la Final del Mundial de Futbol, y el mundo girará igual que el balón en el Luzhnikí.
La final
nos queda por delante el gran duelo, que se jugará en el estadio luzhnikí de moscú, entre francia y croacia