The Sun es un tabloide británico fundado hace 53 años. A lo largo de su poco prestigiosa, pero muy taquillera historia, ha estado involucrado en un sinnúmero de controversias y polémicas. Durante la conocida tragedia de Hillsborough, en la que por negligencia de las autoridades murieron 96 personas, jugó un papel fundamental como aparato gubernamental para mentir respecto de lo acontecido en aquella jornada, y sembrar en la opinión pública la sensación de que los aficionados habían sido culpables de tan lamentables acontecimientos.
Esta es la publicación que eligió Juan Carlos Osorio, todavía entrenador de la selección mexicana de futbol, para hablar de sus planes a futuro y aclarar finalmente si renovará o no su contrato con el equipo tricolor.
Resulta, por decir lo menos, interesante, que elija a un medio extranjero de este corte para hablar sobre lo que busca a futuro. Algunos rápidamente dirán que aquí se deja entrever la envidia de la prensa nacional por no tener la exclusiva, así que rápidamente me permito atajar esta duda en aras de llevar el análisis a otro punto.
NO, el problema radica en que en vez de darlo a conocer a través de la Federación Mexicana de Futbol, lo hace en el país en el que se formó como entrenador y con declaraciones a través de las cuales quiere posicionarse de cara a la Copa del Mundo.
“He rechazado la posibilidad de extender mi contrato con la FMF. La razón es que he querido ser honesto con mis jefes. Si nos va bien me gustaría continuar, pero he sido contactado por otras federaciones y tengo sentimientos por otros sitios.
“Me encantaría dirigir en Inglaterra, porque lo que más extraño es el día a día. Por último, me encantaría estar en la Liga Premier”, son las palabras exactas del colombiano citadas en el artículo por el medio inglés.
La forma en la que está buscando trabajo y haciéndose promoción, mientras tiene frente a sí una Copa del Mundo, es una falta de respeto, todo lo contrario a lo que él dice tener por sus jefes y la selección que le dio la oportunidad. Osorio, quien una vez más ha mostrado su desaire por sus jefes públicamente, se dio el lujo de hacerlos esperar y comunicar su decisión de manera abierta a un medio masivo de comunicación, queriendo decirle a Juan lo que en realidad desea que escuche Pedro.
No obstante, afirma que le gustaría quedarse si México trasciende. Es decir, abre el paraguas para escuchar ofertas desde ahora, pero si no llega nada mejor y logra hacer historia, entonces puede que sí permanezca. Mientras tanto, e independientemente de hacia dónde vaya su carrera, el impacto que esto pueda tener en jugadores que han sido llevados y traídos por las rotaciones del colombiano, pueden ser trascendentales en esta coyuntura. La metarotación, esa en la que el técnico ya se rota a sí mismo mientras que el resto seguimos sin entender.