La convivencia en la Ciudad de México cada vez es más compleja, difícil, violenta. Según datos de la Secretaría de Movilidad, circulan cinco millones 500 mil vehículos, entre particulares, transporte público y de carga, tanto de la Ciudad de México, como del Estado de México y otras entidades del país.
Los congestionamientos de tránsito son parte de lo cotidiano; traslados de más de una hora y velocidad promedio de siete kilómetros por hora. Este escenario provoca desesperación en muchos automovilistas, que buscan llegar a sus destinos en el menor tiempo posible.
Cualquier imprevisto en el trayecto es motivo de una reacción muy airada, violenta, que va desde la simple mentada de madre, hasta verdaderas riñas y algunas personas han sufrido agresiones con arma de fuego y hasta han perdido la vida. Vivimos todos los días un ambiente de crispación por circular en la Ciudad de México.
El colmo sucedió este miércoles. Gabriel Rojo de la Vega ex futbolista del América, el Atlante, San Luis y el rayo Vallecano, protagonizó un momento de ira inexplicable al golpear, junto con su padre, un vehículo en el cual viajaba una familia. En el video que circula por redes sociales se observa al ex futbolista fuera de sí, pateando y golpeando los vidrios de una camioneta, al interior una familia con sus hijos, buscaban calmar al iracundo ex futbolista.
Entre gritos de “ya cálmate” y llanto de los asustados niños, el “jugador” reclamaba lo que seguramente fue un descuido en medio del intenso tránsito. Los hechos ocurrieron, sorpréndase, en el segundo piso del periférico con dirección al sur a la altura de San Ángel. Lo que ha indignado a la opinión pública es que el par de hombres, entrenados en artes marciales, arremetieron con violencia contra una familia y sus pequeños hijos, lo que se traduce en una auténtica cobardía por parte de los “deportistas”.
Lamentablemente historias como ésta se seguirán produciendo en una sociedad crispada, harta, cansada y con una pésima calidad de vida. El gobierno saliente de Miguel Ángel Mancera y el gobierno entrante tienen la delicada tarea de procurar condiciones óptimas de convivencia social en calles y vialidades. El enorme reto es disminuir el parque vehicular a través de una mayor y más eficiente red de transporte público; nos tomará años, pero es urgente, y aun así no hay certeza de que funcione ya que, para la personalidad de la sociedad mexicana, dígame con franqueza, ¿quién está dispuesto a dejar la comodidad de su auto, para subirse al Metro o al Metrobús?
Corazón que sí siente
Mikel Arriola, precandidato del PRI a jefe de gobierno de la Ciudad de México reveló que no está de acuerdo con la marihuana recreativa, la adopción gay y el aborto. Aseguró que son sus convicciones y anunció una campaña centrada en la familia natural. Grupos en favor de la homosexualidad lo denunciaron penalmente por discriminación. Intolerantes.