El miércoles pasado un fondo de inversión que suele invertir en emprendimientos frescos altamente promisorios, llamado Ignia, anunció que había llegado a un acuerdo para financiar la siguiente etapa de crecimiento de una firma llamada “KarmaPulse”, una pequeña compañía muy innovadora, de capital 100 por ciento mexicano, dedicada a desmenuzar datos de redes sociales:
“La compañía analiza conversaciones y mensajes en redes sociales como Twitter y Facebook, interpreta todos los datos generados por usuarios y extrae la información relevante”. En otras palabras: es una compañía de inteligencia de datos… pero, gran diferencia, sus precios son muy accesibles; es decir, cualquier pequeña empresa puede contratar sus servicios para monitorear, interpretar y visualizar datos relevantes en redes sociales.
Hasta ahora se había escuchado con insistencia que la ‘analítica de datos’ era una de las virtudes de la revolución digital. Es verdad, pero se asumía que buena parte de estos beneficios para tomar decisiones basados con información estaban disponibles solo para grandes bancos, aseguradoras, gobiernos, o empresas de productos de consumo. La razón era que se requerían numerosos programadores que hicieran minería de datos e interpretación. Pero KarmaPulse le bajó el precio, y aglutinó un equipo de 27 personas a la ciencia de datos en las redes sociales. Son como la conciencia: todo lo observan; todo lo pueden interpretar; todo lo analizan.
Un ejemplo de lo que hace esta firma lo tuiteó su directora Ximena Íñigo el 22 de junio, cuando liberó una infografía llamada “Muerte en el Periodismo”. En ella, KarmaPulse identificó que, en el período comprendido entre el 6 de mayo al 20 de junio pasado, se escribieron más de 16 mil 700 tuits sobre asesinatos a periodistas en México. El individuo más nombrado al respecto fue Enrique Peña Nieto, que tuvo el mayor número de menciones; mientras que Epigmenio Ibarra quedó en tercer lugar durante el tiempo de la medición.
Una reveladora conclusión obtuvo KarmaPulse de aquella medición: “Aunque el asesinato de periodistas fue tema por el fallecimiento de Miroslava Breach, en 10 días previos a la muerte de Javier Valdez no hay ni una alusión al tema”.
Todo indica que KarmaPulse dio al clavo: medir la conversación de un tema, y generar soluciones económicas. Las virtudes de este herramental interpretativo dan mucho poder. Todo mundo quiere saber cómo ocurre la discusión en las redes sobre sus productos y servicios.
KarmaPulse ya tiene de clientes a la Selección Nacional de Fútbol, Izzi, Banamex y Movistar. Ahora sin embargo vendrá una multiplicación de los clientes de todo tamaño, gracias a la capitalización lograda con Ignia. Es “tecnología de punta a negocios de todos tamaños”, aseguró Álvaro Rodríguez Arregui, fundador del fondo.
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