PRD y su 'formulita mágica”

La presidenta del agonizante Partido de la Revolución Democrática, Alejandra Barrales, descubrió la fórmula mágica para erradicar todos los males que afectan al país:  la inseguridad, la corrupción, la impunidad, el narcotráfico, el desempleo, el mediocre crecimiento económico, la inflación desatada, la devaluación del peso, el aumento del déficit fiscal, la pobreza, la miseria,  desigualdad…y hasta los “huachicoleros”: Cambiar de fondo el régimen presidencialista y el actual modelo de desarrollo económico.   ¡Ah, chingá! ¿Y eso cómo se logra? Preguntan los perplejos. Pues con la construcción de una nueva mayoría política y social que represente la pluralidad democrática de México, les responde la señito “Ale”, quien informó que el único que puede hacer posible tanta belleza, es el  PRD, que históricamente ha sido un instrumento político al servicio de la gente ( sí, “chucha”, le responden sus detractores);  que es una fuerza plural donde conviven tribus, hordas, bandas, pandillas, mafias… y cuyo programa "Otro México es Posible", busca construir un Estado Social y Democrático de Derecho y un nuevo modelo de desarrollo con el que todos sueñan. Según la señora presidenta de ese impresentable partido, la experiencia de la elección del Estado de México les confirmó que son una fuerza política determinante que tiene la posibilidad y la oportunidad de definir los resultados electorales del 2018. ¿Tan ingenua es que no se dio cuenta que sus “primos hermanos” engordaron al PRD con clembuterol para que su candidato Juan Zepeda obtuviera más de 1 millón de votos? ¡Más qué ingenua! Señalan sus detractores, pues ahora resulta que los perredistas quieren aportar experiencias y voluntad política para ayudar en la construcción de una fuerza ciudadana que integre a las organizaciones civiles, sindicatos, asociaciones empresariales, asociaciones productivas, a candidatos sin partido, a líderes de opinión, partidos progresistas y democráticos, a  los jóvenes, a las mujeres, indígenas, campesinos, a productores, empresarios, académicos… en fin, a tofos los que quieran ser parte de la alianza ciudadana de cara a la elección presidencial de 2018, para cambiar el injusto modelo de desarrollo y el corrupto régimen político. Para hacer posible el sueño del cambio, el PRD propuso la construcción de un Frente Amplio Democrático (FAD) donde quepan todos los que se identifiquen con la lucha por las causas ciudadanas. Un Frente que acuerde una coalición electoral ganadora y un gobierno de coalición que actuará con una nueva forma de hacer política y pondrá en marcha un nuevo programa de desarrollo económico para la prosperidad y el bienestar para la familia. ¡Los discursos demagógicos de José López Portillo, Carlos Salinas, Vicente Fox, y otros, se quedaron chiquitos ante el de Alejandra Barrales!, exclama el respetable. Pensamos que el “loquito pata suelta de la izquierda mexicana, Andrés Manuel era insuperable, dicen otros.   Columna anterior: Videgaray, "tres al hilo"