Los alcances y el poder del emprendimiento son mucho más amplios de lo que imaginamos, y en términos sociales, podemos sorprendernos de la calidad y el nivel de innovación que hoy presentan muchos proyectos impulsados por mexicanos.
“Diseña el Cambio” es uno de ellos, un programa educativo que llegó a México en 2010 de la mano de Alfonso Romo Garza Lagüera y su empresa social EducarUNO, la cual tiene como parte de su filosofía basarse en la innovación para promover una educación integral y fomentar un nuevo estilo de vida sin importar tu origen, ubicación ni condición social.
Este programa es un Concurso Mundial de Escuelas creado en la India en el 2009. Los participantes (estudiantes, maestros y miembros de la comunidad) son protagonistas del desarrollo e implementación de proyectos para transformar su entorno y mejorar su calidad de vida.
Para participar, se forman equipos de 5 compañeros y un maestro, que los guía durante “la fórmula del cambio” conformada por cuatro pasos a seguir: siente, imagina, haz y comparte. Tal ha sido el éxito y repercusión, que hoy, a casi siete años de operar en México, más de 23,000 maestros y 115,000 niños de todo el país han creado proyectos que han transformado la vida de 5.7 millones de personas.
La importancia y repercusión de este programa ha sido analizado por la Universidad de Harvard, mostrando que esta metodología fomenta alumnos con capacidad de liderazgo, creatividad y empoderamiento; y, sobre todo, personas empáticas con altas competencias para comunicarse y colaborar.
Son niños que decidieron cambiar, junto con su familia, su futuro como adultos al convertirse en seres autosuficientes, con una gran autoestima y que, tras generar sus propias innovaciones, ahora saben que pueden hacer cualquier cosa sin importar sus condiciones sociales.
EducarUNO estima que para el 2025 “Diseña el cam-bio” será el proyecto de emprendimiento social de mayor impacto a nivel mundial.
En repetidas ocasiones Garza Lagüera ha expresado la necesidad de tener una mejor educación y calidad de vida a partir de una propuesta integral para combatir el rezago que hay en ese sentido.
Con los esfuerzos y el compromiso de este emprendedor social hoy se tienen casos de innovación y disrupción como el proyecto “Del cielo a mi escuela” donde, el equipo de estudiantes de un colegio en el Estado de México, construyó su propio sistema de recolección de agua de lluvia, el cual ahora les provee de agua en sus sanitarios.
Otro caso de éxito es “Recicla y construye”, que permitió la creación de un salón con botellas de PET en Matamoros Tamaulipas.
La lista es larga y fascinante, pero lo más importante es darnos cuenta que, así como estos estudiantes hoy creen en sus capacidades para cambiar su entorno, tú puedes cambiar el mundo con tu emprendimiento social. Compárteme tu idea en Facebook.com/MarisolRumayor.
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