Pobladores del ejido de J. Cruz Gálvez, de la Costa de Hermosillo, Sonora, reportaron que una enorme grieta se abrió con varios metros de profundidad y que se "tragó" algunas reses y un becerro. Los habitantes compartieron en redes sociales algunos videos de lo ocurrido con aquella zona.
"Aquí vemos esta grieta en el Ejido J. Cruz Gálvez y no sé si Conafor podría ayudarnos, lamentable es así esto que se raja la tierra, no sé si sea evolución mire, aquí vea cómo cayeron estos animales a la zanja. Mala la temporada y ahora con esto, aquí se cayó una becerra", dice un hombre que grabó el agrietamiento.
Los pobladores del ejido de J. Cruz Gálvez señalan que en el 2014 el mismo fenómeno se presentó en la capital del estado, lo que especialistas atribuyeron a la filtración de agua tras las lluvias, lo que hasta el momento se desconoce con certeza.
¿Qué está pasando con las enormes grietas en Tamaulipas?
En julio pasado, muy cerca de donde ahora se reporta el agrietamiento ocurrió uno muy parecido pero en Ciudad Tula, en donde los pobladores también reportaron una grieta de tres kilómetros de extensión. Tras la difusión de algunos videos, el geólogo Sergio Almazán, autor del libro "Planeta Tierra, riesgos geológicos y desastres naturales" dio la respuesta ante lo que posiblemente puede estar sucediendo en Tamaulipas, en donde se erige sobre un terreno que entremezcla el bosque y el desierto, dando vida a paisajes sumamente contrastantes.
El geólogo Almazán, quien es egresado del Instituto Politécnico Nacional (IPN), indicó que: "Las fuertes lluvias e inundaciones provocan muy a menudo deformaciones del suelo, deslizamientos de tierra y grietas", lo que puede ser el origen de la grieta de tres kilómetros que se formó en Ciudad Tula.
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