Morena no cedió frente a la oposición y busca llevar hoy al pleno del Senado la Ley reglamentaria de la revocación de mandato, con una pregunta que ratifica la gestión del presidente, así como un candado a las reglas del INE y un permiso para que el mandatario Andrés Manuel López Obrador pueda opinar.
De acuerdo con el dictamen que fue circulado a los senadores y se prevé ser discutido en la sesión de hoy, la pregunta sería: ¿Estas de acuerdo en que (nombre), presidente de los Estados Unidos Mexicanos, continúe ejerciendo su cargo hasta que concluya su mandato?
Morena insistió en que la pregunta debe ir en sentido positivo a la ratificación del presidente, situación que ha generado el rechazo de la oposición.
Y aunque el dictamen original prohibía cualquier propaganda de partidos políticos y dependencias federales, Morena propuso una reserva en la que, "sin perjuicio en lo establecido en el artículo 134 de la Constitución, el titular del Ejecutivo Federal tendrá el derecho de opinar e informar acerca de la continuidad de su cargo".
Asimismo, los partidos políticos nacionales podrán promover la participación ciudadana para el procedimiento de revocación de mandato.
La reserva, que fue trabajada con senadores morenistas y Palacio Nacional, también le pone un candado a las reglas que emita el Instituto Nacional Electoral (INE) para que no puedan ser válidas.
"A partir de la entrada en vigor del presente decreto, se derogan todas las disposiciones normativas que se opongan al mismo", precisa el documento.
En dicha reserva también se propone cambiar la pregunta, pero en el mismo sentido de ratificación: "¿Estas de acuerdo en que (nombre) siga en la Presidencia de la República hasta que termine su periodo?
Y para ello las respuestas tendrían que ser las siguientes: Sí. Que siga en la Presidencia de la República. No. Que no siga en la Presidencia de la República.
Según el dictamen de la Comisión de Gobernación del Senado, la consulta se realizará en marzo de 2022, pero quien la solicite deberá recolectar al menos el tres por ciento de las firmas ciudadanas de padrón electoral, mismas que tendrán que ser corroboradas por el INE.