Sobrevivieron a Los Caballeros Templarios y, ahora, el grupo de civiles armados que se levantaron como autodefensas de Tepalcatepec luchan por impedir que el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) irrumpa en su territorio y nuevamente vivan a merced de los criminales.
Como hace siete años, hombres armados vigilan Tepalcatepec desde diferentes puntos del pueblo y de la serranía de ese municipio, ubicado en la región Tierra Caliente de Michoacán, a 250 kilómetros de la capital del estado.
Algunos portan las armas que el anterior gobierno federal les proporcionó y registró durante el movimiento armado de 2013; otros se han adueñado de los fusiles que integrantes del CJNG han abandonado tras los enfrentamientos, y unos más, cargan armamento de cacería.
Sin importar su edad –los hay jóvenes y adultos que llegan casi a los 60 años–, los hombres armados afirman que poner su vida en riesgo vale la pena, cuando se trata de mantener a salvo a sus familias, sus tierras y sus trabajos.
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“Me dedico a sembrar maíz, a cuidar mi ganado, a cuidar a mi familia en primer lugar, y a ayudarles aquí (en las barricadas), porque ya tenemos tiempo en esta guerra y quieren quitarnos nuestro municipio. Corrimos a unos (Los Caballeros Templarios) y a estos (CJNG) no los hemos dejado hacer lo que ellos quieren”, afirma un autodefensa.
En un recorrido de El Heraldo de México por Tepalcatepec, se observó que al menos en siete puntos se han desplegado civiles armados para cerrar paso al CJNG.
Señalan que hoy, la batalla del CJNG para lograr ingresar a Tepalcatepec es más cruenta que hace un año, cuando a finales de agosto de 2019, arribó proveniente de Jilotlán, Jalisco, un convoy con decenas de hombres que atacaron a la Policía Municipal, y posteriormente, a los pobladores que sacaron sus armas para evitar la invasión.
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Desde entonces hasta ahora, los intentos por ingresar han sido persistentes. Apenas el pasado 28 de julio se registró un ataque contra una base militar en Tepalcatepec y contra el grupo de autodefensa.
El resultado, fue el aseguramiento de un vehículo en el que viajaba un grupo élite del CJNG y el hallazgo de drones cargados con explosivos.
“Son tipo C-4 (explosivo plástico); encontramos seis artefactos, más o menos, y tres drones. Ahí se ve lo que traen adentro: son balines de acero”, explicó uno de los jóvenes que localizó los artefactos en una zona donde fueron atacados.
Tal como lo describe, el objeto elaborado de forma artesanal consiste en un recipiente plástico sellado con cinta de aislar que en su interior deja ver un puño de bolas metálicas. Otro de los explosivos contenidos en un segundo recipiente está unido con cinta industrial a un dron color gris.
Además de sobrevolar la zona con explosivos, los autodefensas aseguraron que el Cártel Jalisco ha comenzado a abrir nuevos caminos, para lograr su ingreso a Tepalcatepec a través de rutas alternas, aunado a las amenazas que han lanzado por medio de videos en redes sociales.
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“Hay unas brechas que conectaron por el Ahuijullo (Jalisco), y es por lo cual tenemos gente puesta allá. Estamos esperando amenazas por ese lado y tratan de intimidarnos. Desde este cerro que se ve ahí, (a escasos cinco kilómetros), grabaron el último video donde nos amenazan y ofrecen a la Guardia Nacional una cantidad de dinero para que no se meta. Así de cerquitas están”, explica otro habitante de Tepalcatepec.
Para el hombre, que también formó parte de la lucha contra Los Caballeros Templarios, la intención del CJNG es clara, y Tepalcatepec es un punto clave, afirma, para las actividades delictivas del cártel.
“Están los desembarques de droga por la parte del mar. Ellos quieren tener el control de las playas y tener el libre paso para llegar hasta Morelia con cargamentos, o bajar minerales del lado de Aguililla. Ellos pelean por los minerales y por el control de la droga, y nosotros peleamos por nuestras familias”, aseguró.
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A bordo de una camioneta sin blindaje, dos autodefensas se dirigen hacia una de las barricadas que fueron atacadas la noche del 28 de julio y que colinda con la localidad de El Aguaje, municipio de Aguililla, escenario de otra guerra que sostienen el CJNG y el grupo de Los Viagras.
Al arribar, los dos hombres son informados del hallazgo con vida de un joven autodefensa que estaba desaparecido desde el último ataque ocurrido cuatro días antes, y quien, al intentar ponerse a salvo, se extravió en un cerro aledaño.
Los hombres reportan que se encuentra desorientado y deshidratado, por lo que trasladan al joven a la cabecera municipal para ser atendido por un médico.
Los dos autodefensas continúan su camino hacia el campamento de los guardias comunitarios, y en el trayecto se encuentran con dos camionetas, con cerca de 30 integrantes que se dirigen hacia el mismo lugar.
El convoy se adentra en la zona serrana y detiene su marcha en las faldas de un monte, donde todos descienden para continuar el recorrido a pie.
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Para llegar a la mayoría de las barricadas, es necesario caminar por brechas y atravesar cerros bajo un sofocante sol y una temperatura cercana a los 40 grados centígrados, condiciones características de esta región.
A pesar de no contar con el sofisticado armamento, ni equipo táctico, ni vehículos blindados que el cártel y su grupo élite exhibe en videos difundidos en redes sociales, los autodefensas consideran que su mayor desventaja es no contar con el apoyo de las autoridades.
“Nos sentimos en mucha desventaja más que nada por el gobierno, porque no nos apoya. Le estamos ayudando al gobierno”, recrimina un padre de familia, de 56 años.
Ahora, lamentan, sólo les queda continuar en su lucha y esperar una efectiva intervención de las autoridades o, como lo hicieron en el año 2013, acabar ellos mismos con el asedio criminal, a costa, incluso, de sacrificar su propia vida.
Por: Charbell Lucio/Corresponsal
hgm