Desde que estalló la crisis sanitaria del COVID-19 en México, el hombre clave ha sido el subsecretario de Promoción y Prevención de la Salud, Hugo López-Gatell.
A diario, a través de conferencias de prensa, en Palacio Nacional, informa las medidas adoptadas en la lucha contra el virus y actualiza cifras de muertos y contagios. Sin embargo, parece que algunos personajes de la vida política del país no están muy conformes con su manera de conducir el tema ni sus decisiones.
Silvano Aureoles, gobernador de Michoacán, confrontó al funcionario federal a través de un video, donde dijo que no adoptarán las medidas anunciadas, pues "vamos a cuidar la salud de nuestra gente. Si ustedes quieren seguir engañando a la población del país, pues háganlo...".
El polémico gobernador de Baja California, Jaime Bonilla, también se ha manifestado contra el subsecretario de Salud, pues denunció que el sector salud "no se ha puesto las pilas" y que el estado está sufriendo los embates de la pandemia, principalmente los médicos.
La oposición no se queda atrás
En redes sociales, nueve gobernadores blanquiazules denunciaron que la calidad de los insumos enviados para atender el problema del COVID-19. Asimismo, dijeron no haber recibido ingresos extra de parte del Gobierno Federal para el mismo fin.
¿Cuál fue la respuesta de López-Gatell?
Durante la conferencia de prensa matutina del 14 de abril, López-Gatell dijo que "es deseable que en una sociedad plural todo el mundo se pueda expresar, que todo el mundo encuentre libertad para sus opiniones, no siempre hay que coincidir. Es una responsabilidad individual de cada quien situarse en el lado de la verdad o en el lado de la mentira y en la intención de comunicar algo, la responsabilidad que eso implica”.
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Por Redacción Digital El Heraldo de México
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