Roberto Castillo fue parte del movimiento que llevó a Pedro Kumamoto a ser diputado independiente en el Congreso de Jalisco. Ahora, el joven de 27 años va por un lugar el en primer Congreso local de la Ciudad de México, cansado de que unas pocas personas tomen decisiones “en lo oscurito”.
El joven integrante del movimiento Wikipolítica aseguró que este año electoral es un momento relevante para que la ciudadanía recupere el poder político y la toma de decisiones.
“Es momento para que quienes no nos sentimos representados por los partidos políticos, tengamos un lugar. Creemos en el poder de la gente en la toma de decisiones, en cómo se manejan los recursos de la ciudad. Debe haber participación, porque quienes ahora gobiernan, no lo están haciendo bien”, dijo en entrevista.
Roberto aspira a ser diputado local independiente por el distrito 26, con cabecera en Coyoacán, uno de los principales bastiones más cuestionados del PRD en la ciudad.
Durante más de dos meses trabajó para recolectar las dos mil 226 firmas para aparecer en la boleta como candidato independiente al Congreso.
Su manera de convencer a la gente para recibir su apoyo fue similar a la que hace tres años usaron en Jalisco con Kumamoto, quien finalmente ganó una diputación.
“Le dijimos a la gente que nuestra bancada no iban a ser los partidos, sino las personas y ha funcionado, creemos que es un modelo exitoso”, señaló.
Experto en temas de transparencia y participación ciudadana, considera que las candidaturas independientes, al igual que las que son respaldadas por partidos “deben ser sujetas al mayor escrutinio público y de las autoridades electorales. Deben ser vigiladas y ser puestas al ojo de la crítica”.
Esto después de que el Instituto Nacional Electoral (INE) detectó que aspirantes a diputaciones federales, senadurías y alcaldías habían usado firmas falsas para garantizar los apoyos que les otorgaran el registro.
No obstante, Castillo estimó que ese antecedente no va a empañar el esfuerzo de las candidaturas independientes.
“No es justo que personas busquen utilizar las candidaturas sin partido para su beneficio, violando la ley”, apuntó.
Aunque en enero Roberto ya había alcanzado las firmas necesarias para el registro, siguió trabajando hasta el 17 de febrero, fecha en que concluyó el plazo para recolectar los apoyos ciudadanos.
Al hablar sobre sus recorridos por las calles y el cierre de la convocatoria de firmas, señaló que día a día, el apoyo de la gente fue en aumento y que, en comparación a hace tres años con Kumamoto, siente un aumento en el respaldo.
“Creemos que (el 1 de julio) la nota principal la vamos a dar los movimientos que estamos generando esperanza, que estamos haciendo las cosas bien y estamos juntando las firmas de manera válida”, expresó.
POR LIZETH GÓMEZ DE ANDA