Si el mexicano promedio dejara de consumir 16 litros de refresco al año, el índice de obesidad en el país se reduciría hasta 6.85 por ciento y se podrían prevenir 476 mil casos de diabetes en los próximos 33 años, de acuerdo con un estudio del Instituto Nacional de Salud Pública (INSP), financiado por la Universidad de Michigan.
Los investigadores analizaron la reducción de 6.1 por ciento en el consumo de bebidas azucaradas que hubo en el país, un año después de que entrara en vigor el impuesto de un peso por litro a este tipo de bebidas a principios de 2014. Con este análisis proyectaron cuáles serían los beneficios de este impuesto en los próximos 10, 13 y 33 años, así como la pertinencia de duplicar el impuesto para obtener el mismo beneficio en la salud de los mexicanos.
Según sus estimaciones a partir del estudio, el mexicano consume un promedio de 323 mililitros de refresco al día —casi el contenido de una lata—, y tras el impuesto podría reducir su consumo en 22 mililitros al día durante los próximos 10 años. Esto representaría una disminución de 15 puntos en el índice de masa corporal del mexicano promedio.
“La reducción conseguida con el impuesto podría parecer pequeña desde la perspectiva individual, pero conseguir esta reducción a nivel de la población con una única política es relevante, ya que se traduce en 2.54 por ciento de reducción de la obesidad en 10 años de cobrar el impuesto”, se explica en el estudio.Además de la reducción de los niveles de obesidad en el país, los investigadores encontraron que disminuir el consumo de bebidas azucaradas con esta política podría prevenir un promedio de 92 mil casos de diabetes en 2030 y 184 mil si el impuesto se duplica. A finales del año pasado, la Secretaría de Salud lanzó una alerta epidemiológica a causa de la diabetes. Bajo este contexto, los investigadores sugieren que duplicar el impuesto a las bebidas azucaradas podría producir efectos positivos en la salud. “Incrementar los impuestos a bebidas azucaradas, podría convertirse en una herramienta crítica para reducir la obesidad y la diabetes”, explica en las conclusiones. Por Iván Ramírez; ivan.ramirez@heraldodemexico.com.mx; @Cuartoscuro