Falta de agua, cortes de energía y aumento del ambulantaje son los efectos que han dejado las obras de reencarpetamiento en la Zona Rosa, realizadas por el jefe delegacional Ricardo Monreal.
A estas afectaciones se suma la falta de información sobre los avances de los trabajos, denunciaron vecinos de la colonia Juárez.
César Jiménez, miembro del Comité Vecinal Juárez, dijo que fueron notificados de las obras en una junta de funcionarios de la delegación con vecinos y comerciantes en la Plaza Ángel, pero siempre tuvieron incertidumbre, debido a que “jamás hubo una consulta, no hubo participación de nosotros en el proyecto”. Dijo que los habitantes y el comité desconocen los avances de la obra.
Silvia Uribe, habitante de la calle Génova, ha sufrido los efectos de las obras: “Nos hemos quedado sin luz, sin teléfono y sin agua”. La semana pasada, debido a la explosión de una instalación eléctrica a causa de las obras, el edificio donde vivo, y cinco comercios más estuvieron a oscuras un día y medio. Estaba recién colado el cemento y volvieron a hacer hoyos por todos lados para reparar la falla”, expresó.
Cuestionó la poca información que hay sobre los trabajos. “No sé a quién contrató Monreal, pero no resuelve nada. El proyecto es maravilloso pero no vemos un avance y toda la colonia está así”.
Cuando inició el proyecto que rehabilitará 15 calles de la Zona Rosa, los vendedores
ambulantes concentrados en Génova fueron retirados. Eran cerca de 200 con puestos fijos, semifijos y los toreros. Ahora todos se colocaron en las calles interiores de la periferia cercana a Reforma, aparentemente, dicen vecinos, en consenso con la demarcación.
Por: Lizeth Gómez de Anda