Una joven brasileña identificada como Claudia de Albuquerque Celada de 23 años de edad quedó paralizada luego de que comió una sopa contaminada de una extraña bacteria y contrajo la enfermedad "botulismo". Esto ocurrió mientras estaba participando en un intercambio en Aspen, Estados Unidos.
De acuerdo con el testimonio de una de sus amigas de nombre Malu, Claudia comenzó a experimentar síntomas como visión borrosa, mareos y dificultad para respirar. En este sentido, comenzó a recibir atención médica en un hospital de la ciudad estadounidense.
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No obstante, en ese momento se enfrentaron a un nuevo reto: los altos costos del servicio médico. Su hermana, Luisa, contó que cada día de la hospitalización de Claudia, costaba alrededor de 10 mil dólares, motivo por el que decidieron dar inicio con su traslado hasta Brasil.
¿Cuál es el estado de salud de Claudia?
Según la información disponible hasta el momento, los hechos ocurrieron hace varios meses atrás. De hecho, se informó que la joven fue hospitalizada en Estados Unidos el 17 de febrero de este año y alrededor de 15 días después se confirmó que tenía botulismo.
Posteriormente y debido a que los costos del hospital comenzaron a crecer de forma exponencial, los seres queridos de Claudia comenzaron a procesar su traslado a Brasil y fue el pasado 15 de abril cuando el neumólogo aprobó que fuera llevada a su país, donde ha continuado con su tratamiento.
Con base en los reportes más recientes, la joven brasileña ha comenzado a experimentar algunos progresos en su estado de salud. Entre los más importantes se encuentran el de respirar durante una hora o escribir su nombre, motivos por los que los médicos han mostrado su optimismo.
¿Qué es el botulismo, enfermedad causada por la extraña bacteria que enfermó a Claudia?
Con base en datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), el botulismo de transmisión alimentaria es una enfermedad ocasionada por las toxinas que produce la bacteria llamada “Clostridium botulinum” y que, en determinadas situaciones, puede llegar a ser grave e, incluso, mortal.
Un punto importante a resaltar es que aunque es un padecimiento inusual, por lo general se transmite por medio de consumir alimentos contaminados con las neurotoxinas “muy potentes”. Asimismo, otros aspectos a considerar es que no se puede transmitir de persona a persona y que entre sus principales síntomas están los siguientes:
- debilidad
- fatiga
- vértigo
- visión borrosa
- sequedad en la boca
- dificultades para tragar y hablar