Parece que Japón enfureció sin medida alguna al gobierno de Vladímir Putin, pues ahora los rusos amenazaron y prometieron "responder" las sanciones económicas que Tokio les impuso, todo porque —en un comienzo— al Kremlin "se le hizo fácil" practicar sus movimientos militares cerca de la frontera japonesa, acción que molestó mucho a la región asiática y no dudó un segundo en dejarle clara su postura. Ahora, las tensiones entre las potencias de todo el mundo incrementan, y ya no es solo Occidente "quien está en contra" de Rusia, también se sumó el país del territorio del Océano Pacífico y un enfrentamiento entre estos dos, aunque no sea bélico, causa terror entre la población.
Todo empezó con unos aviones de reconocimiento rusos
Japón no hubiese detonado tales medidas de no sentirse asediado por Rusia, quien ya tiene un largo historial de atacar a las regiones aledañas para hacer su voluntad. En esta ocasión, las chispas de la "gran bomba" están entre Vladímir Putin y el primer ministro de la región asiática, Fumio Kishida. Y es que de por sí ya había una mala relación entre estos dos tras la guerra que los rusos desataron en Ucrania —desde febrero del año pasado— pero ahora uno de los movimientos militares que hizo el Ejército del país de euroasia cerca de la frontera japonesa, detonó una advertencia dura en contra de Moscú.
Hace unos días, unos aviones de reconocimiento rusos sobrevolaron aguas del mar de Japón. Inmediatamente el actuar de Moscú activó las alarmas de la fuerza aérea del país asiático y después de esto, el primer ministro japonés decidió endurecer las sanciones económicas y comerciales contra el gobierno de Vladimir Putin. Ante esto, Rusia no se quedó callada y el Ministro de Asuntos Exteriores —bajo la tutela de Serguéi Lavrov— acusó al territorio del Océano Pacífico de “convertirse en el líder de las restricciones antirrusas” y lanzó una dura advertencia donde aseguró que “responderán” al último paquete de sanciones anunciado por Tokio.
“Continuamos monitoreando la implementación práctica de dichos pasos y evaluando su posible impacto en la seguridad nacional y la economía”, manifestó todo el gabinete diplomático ruso en un comunicado en el que apunta directamente en contra de Fumio Kishida.
Japón sancionó a Rusia el pasado jueves 25 de mayo
El Gobierno japonés anunció el pasado jueves 25 de mayo la ampliación de las sanciones contra Rusia “a la luz de la situación internacional actual que rodea Ucrania, y con el fin de contribuir a los esfuerzos internacionales para la paz destinados a resolver este problema”. Dicho esto, la cartera de relaciones exteriores del país asiático confirmó la congelación de activos de 78 organizaciones y 17 individuos rusos, así como la prohibición de exportaciones a 80 empresas, más la negativa a exportar bienes que “fortalezcan” la industria rusa. Por último, añadieron una prohibición de la “prestación de servicios de arquitectura e ingeniería” al país euroasiático.
Entre los sancionados se incluyen funcionarios de las regiones ucranianas anexionadas por Moscú —en septiembre del año pasado— tras referéndums fraudulentos. Hablamos de los lugares de: Donetsk, Lugansk, Jersón y Zaporiyia, así como varios militares e incluso una presentadora de televisión.
Las armas nucleares rusas son el mayor miedo de Tokio
Luego de esto, Rusia también denunció los intentos de las autoridades japonesas de difundir la idea de que Moscú está tratando de implementar un “chantaje nuclear” en el marco de invasión a Ucrania, la cuál lleva ya 15 meses.
“El deseo de atribuir a Rusia la falsa intención de utilizar armas nucleares en relación con los acontecimientos en Ucrania no es más que una especulación cínica y sin escrúpulos”, remarcó la dependencia diplomática rusa.
Moscú también enfatizó que no ha variado su enfoque respecto a este tema y le ha pedido a Tokio a que “muestre una preocupación similar con respecto a las armas nucleares estadounidenses ya desplegadas en Ucrania”. Por su parte, las autoridades japonesas condenaron la decisión de Rusia de trasladar el armamento nuclear hacia territorio bielorruso y exigieron el cese de tales acciones porque “aumentan las tensiones” mundiales.
“Japón, es el único país que ha sufrido bombardeos atómicos durante la guerra, no podemos aceptar en absoluto la amenaza de armas nucleares de Rusia, y mucho menos su uso”, subrayaron las autoridades niponas.
Cabe destacar que el presidente de Bielorrusia, Alexander Lukashenko, confirmó que su homólogo ruso, Vladimir Putin, inició el traslado de armamento nuclear hacia territorio su territorio. Dicha noticia ya ha recibido críticas a nivel internacional, incluido el de Estados Unidos y la Unión Europea. Ahora está previsto que el próximo 1° de julio finalice la construcción de una serie de instalaciones de almacenamiento para este tipo de armamento. Por su parte, Moscú ya ha entregado a Minsk —capital de Bielorrusia— un sistema de defensa antimisiles Iskander, que puede portar ojivas nucleares, al tiempo que ha contribuido al entrenamiento y equipamiento de las fuerzas rusas para que puedan hacer uso de “munición especial”.
Con información de Europa Press*