El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, anunció ayer una serie de sanciones contra Rusia, cortando su financiación de Occidente y castigando sus bancos y su acomodada élite, en represalia por lo que llamó el "comienzo de una invasión" a Ucrania.
Tras una primera reacción después del discurso de Vladimir Putin el lunes, Washington alzó la voz.
"Es el comienzo de una invasión", declaró Biden en la Casa Blanca. Putin está "elaborando justificaciones para ir mucho más lejos".
En respuesta, EU va a imponer una "primera tanda" de sanciones que deben cortar al gobierno ruso del financiamiento occidental, anunció el mandatario. "Estamos implementando sanciones sobre la deuda soberana de Rusia".
El sector financiero también fue puesto en la mira, al decretarse el "bloqueo total" contra el VEB, la banca pública de desarrollo; y el PSB, ligado al sector de Defensa, con más de 80 mil millones de dólares en activos.
El Presidente de EU igualmente decidió sancionar a las élites rusas y sus familias. "Ellos comparten las ganancias corruptas de las políticas del Kremlin y deben compartir el dolor también", dijo. La cabeza del servicio de inteligencia ruso (FSB), Alexandre Bortnikov, está en la lista.
Autorizó el despliegue de tropas estadounidenses en los países bálticos, en Estonia, Letonia y Lituania.
EU también saludó las sanciones tomadas del otro lado del Atlántico contra Moscú, y en especial la suspensión por parte de Berlín de la autorización del controvertido gasoducto Nord Stream 2, que Washington lleva tiempo denunciando.
PAL