Las alergias severas son probablemente el principal enemigo de las vacunas contra el coronavirus, pues pueden ser una contraindicación para no recibirla. Sin embargo, solamente hay algunos tipos de ellas que realmente podrían causar daño con la inyección.
Las alergias alimentarias, estacionales y al polvo son las más comunes en todo el mundo. Pero, en realidad el haber tenido un choque anafiláctico por alguno de estos elementos no te pone en riesgo frente a las vacunas.
Lynne Regent, una experta en alergias que preside la organización Campaña Anafiláctica en Reino Unido, explicó a la revista New Food, que uno de los principales temores de las personas es que otras vacunas, como la de la influenza o la gripe estacional, causan efectos secundarios en quienes presentan alergias a la comida.
Regent explicó que, en estos casos, sucede porque los componentes de estos fármacos incluyen cosas cultivadas en productos orgánicos e incluso en huevos de gallina. Sin embargo, las vacunas desarrolladas contra el coronavirus tienen tecnologías innovadoras con ingredientes sintéticos que no involucran ningún tipo de alimentos.
¿Quiénes no deberían vacunarse?
De acuerdo con los CDC, se considera una alergia grave cuando necesita “ser tratada con epinefrina” o bien, que requiere de atención en la sala de emergencias de un hospital. Y, en su portal, detalla que las únicas personas que no deberían recibir los fármacos de inmunización frente al coronavirus son quienes hayan presentado esta reacción a los ingredientes de estos fármacos.
- Si es alérgico al PEG, no debería aplicarse una vacuna contra el COVID-19 de ARNm. Consulte a su médico si puede recibir la vacuna de J&J/Janssen.
- Si es alérgico al polisorbato, no debe recibir la vacuna contra el COVID-19 de J&J/Janssen. Consulte a su médico si puede recibir una vacuna contra el COVID-19 de ARNm.
De igual forma, resaltan que para quienes tienen alergias a otras vacunas es necesario que se busque una orientación médica específica, para poder pre visualizar las consecuencias de la vacuna contra el COVID-19.
¿Qué hacer si reaccionas con alergia ante la vacuna?
Los CDC sostienen que, muchas de las personas, han desarrollado una afección a la que denominaron “brazo COVID-19” y que consiste en la aparición de ronchas y picazón en el área donde se aplica la inyección.
Este problema puede ser molesto, pero no pone en riesgo la salud y, en estos casos, es recomendable que la segunda dosis se reciba en el otro brazo.
“Si el sarpullido le provoca picazón, puede tomar un antihistamínico. Si es doloroso, puede tomar medicamentos para el dolor como el acetaminofeno o un medicamento antiinflamatorio no esteroide”, aclaran.
Por otro lado, puntualizan que Todas las personas que se vacunan contra el COVID-19 deberían ser monitoreadas en el lugar”. En el caso de quienes han tenido reacciones a medicamentos, deben mantenerse bajo vigilancia por 30 minutos, y el resto al menos por 15.