En el año 2007, en las costas de British Columbia, la provincia más occidental de Canadá, una serie de eventos misteriosos tuvo lugar. Todo empezó cuando en una playa apareció un pie mutilado, luego se hallaron más extremidades. Desde ese entonces se crearon teorías conspirativas y leyendas urbanas, pero 14 años después por fin se supo la verdad.
Una investigación sugirió que las partes de cuerpos encontradas se debían a un desmembramiento por descomposición en el océano. Los dos primeros pies estaban dentro de tenis, los cuales fueron analizados y se descubrió que unos se fabricaron entre 2003 y 2004, además de que se pudieron haber comerciado en India y Estados Unidos, pero eso no resolvía nada.
El ambiente se enrareció más un año después, en 2008, cuando encontraron el pie de un chico de 21 años que había desaparecido cuatro años antes. Luego se encontró el pie derecho de una mujer. Las autoridades ni la población entendían qué pasaba. Los hallazgos siguieron hasta 2016, no sólo en British Columbia, sino también en su vecino Washington, EU. En total fueron 21 pies.
Sin explicaciones, las teorías abundaron
Se llegó a creer que todo se trataba de un asesino en serie suelto o que la mafia se deshacía de los cuerpos. Otras hablaban de posibles personas desaparecidas tras un accidente de avión que cayó en el océano, quizás algún naufragio o los restos de un tsunami.
Tras varios estudios, las respuestas al misterio eran ambiguas, ya que las corrientes oceánicas pueden transportar objetos flotantes a largas distancias, además, las corrientes en el Estrecho de Georgia son impredecibles.
Pero parece que por fin se sabe lo que ocurrió, y no fue ninguna de estas posibilidades, tal y como ha explicado la forense Barb McLintock al National Post. Primero, aclaró que los cuerpos debieron haber caído enteros al océano y los pies se desprendieron luego de ser comidos por los peces carroñeros.
Después precisó que posiblemente hayan sido accidentes inconexos y que la única razón de que los pies llegaron a la superficie es por los materiales del calzado, que hicieron que las extremidades flotaran y llegaran hasta las costas, de no haber llevado tenis o zapatos con suelas plásticas, los cuerpos habrían sido devorados o permanecido en el fondo del mar. La explicación no es la más increíble, pero es la más probable.
msb