Dos buques de guerra de Estados Unidos y Rusia atracaron en los últimos días en Puerto Sudán, en el país africano, pero cada uno por diferentes razones: el Kremlin establecerá una base naval en ese lugar, mientras que Washington llega en búsqueda de estrechar la alianza con las fuerzas armadas de Sudán.
La embarcación rusa
El domingo la fragata rusa Almirante Grigorovich arribó a la ciudad sobre el Mar Rojo, de acuerdo con la agencia AFP.
La llegada se da luego de que en diciembre Rusia anunciara la firma de un acuerdo de 25 años de duración para construir una base naval en Puerto Sudán, lo que forma parte de la última movida de Moscú en África en su intento de renovar su influencia. Según el acuerdo, el objetivo de las instalaciones será “mantener la paz y la estabilidad en la región”.
La fragata repostará y su tripulación descansará después de los ejercicios en el Océano Índico frente a Pakistán, indicó la marina rusa.
Mientras que el ejército de Sudán declaró que la visita del almirante Grigorovich formaba “parte del avance de las relaciones diplomáticas” entre ambos países, según un comunicado.
La armada rusa podrá mantener hasta cuatro barcos a la vez en la base, incluidos los de propulsión nuclear. La base contará con un máximo de 300 efectivos militares y civiles.
El buque estadounidense
La llegada de USS Winston S. Churchill, un destructor misilístco de la clase Arleigh Burke, se produce después de que Washington retirara a Sudán de la lista de Estados patrocinadores del terrorismo, tras la destitución en abril de 2019 del hombre fuerte Omar al-Bashir.
El 24 de febrero, otro buque estadounidense atracó en el puerto, lo que “pone de manifiesto la voluntad” de los militares estadounidenses de “reforzar su renovada asociación” con las fuerzas armadas de Sudán, dijo entonces la embajada estadounidense en Jartum en un comunicado.
Este arribo fue el "primer barco de la marina estadounidense que visita Sudán en décadas", informaron.
Mientras que la llegada del USS Churchill “arroja luz sobre el apoyo de Estados Unidos a una transición democrática en Sudán", dijo el Encargado de Negocios estadounidense Brian Shukan.
CRS