El gobierno de Dinamarca confirmó 183 casos de la nueva variante Ómicron del coronavirus, una evolución "preocupante".
Hasta el último balance, el viernes, el país sólo había reportado 18 casos y otros 42 eran considerados sospechosos, según datos del instituto público SSI, por lo cual el número de positivos se habría triplicado en apenas 48 horas.
Dinamarca es uno de los países punteros en materia de secuenciación de virus en Europa, por lo que puede detectar más enfermos con mayor rapidez.
Sin embargo, no significa que la transmisibilidad de la nueva variante sea más fuerte allí que en otros lugares.
Mientras, Reino Unido informó de otros 86 casos de Ómicron, lo que eleva el total a 246, según la BBC.
El gobierno británico volvió a imponer el uso de mascarillas en tiendas y el transporte público, pero descarta, por ahora, hacerlas obligatorias en la hostelería.
ESTADOS UNIDOS, EN ALERTA
La variante Ómicron ya se extendió a alrededor de un tercio de los estados de Estados Unidos, pero la versión Delta sigue representando la mayoría de los casos de COVID-19 en todo el país, informaron funcionarios de salud.
Aunque la nueva variante ha causado alarma en todo el mundo, Anthony Fauci, el principal funcionario de enfermedades infecciosas de EU, dijo a CNN que "hasta ahora no parece que haya un gran grado de gravedad", pero agregó que era muy rápido para sacar conclusiones y necesitan más estudios.
Al menos 15 estados han informado casos de Ómicron.
PAL