Todo el año, podemos encontrar toda clase de delicias en la calle. Sin embargo, en temporada de calor puede ser mucho más peligroso consumirlos, pues debido a las altas temperaturas los alimentos pueden descomponerse, perder nutrientes y en el peor de los casos, estas pueden facilitar el crecimiento de bacterias y otros patógenos.
Por esta razón, expertos aconsejan evitar el consumo de comida callejera, sobre todo en temporada de calor, pues todos los alimentos pueden volverse peligrosos cuando no se les da un mantenimiento adecuado y en la calle es difícil refrigerarlos, lavarlos y tenerlos frescos.
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¿Cuáles son las consecuencias de comer en la calle durante la temporada de calor?
- Descomposición de alimentos:
Las altas temperaturas pueden acelerar la descomposición de los alimentos, especialmente si se dejan al aire libre durante mucho tiempo como los de la calle. Sobre todo, si no se refrigeran adecuadamente, pues se vuelven más susceptibles a la contaminación bacteriana, lo que aumenta el riesgo de intoxicación alimentaria.
- Pérdida de nutrientes:
Las altas temperaturas también pueden afectar la calidad nutricional de los alimentos, especialmente si se dejan al sol durante períodos prolongados, como los que venden en la calle. Algunas vitaminas y minerales pueden degradarse con el calor, lo que puede reducir el valor nutricional de los alimentos.
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- Intoxicación alimentaria:
La exposición al calor puede facilitar el crecimiento de bacterias, virus y otros patógenos en los alimentos. Estos pueden contaminarse con bacterias como Salmonella, E. coli o Listeria, los cuales se caracterizan por síntomas como náuseas, vómitos, diarrea y fiebre. Al comer en la calle, nos encontramos más expuestos a intoxicarnos, por lo que es aconsejable evitarlo.
- Desecación y deshidratación:
El calor, puede aumentar el riesgo de deshidratación, especialmente si se acompaña de una exposición prolongada al sol. Comer en la calle durante las altas temperaturas puede provocar una mayor pérdida de líquidos a través del sudor, lo que aumenta la necesidad de mantenerse hidratado.
- Malestar gastrointestinal:
Las altas temperaturas pueden hacer que el sistema digestivo trabaje más rápidamente para digerir los alimentos. Comer alimentos pesados o grasos, como los de la calle, mientras se está expuesto al calor, puede aumentar el malestar gastrointestinal, causando sensaciones de pesadez estomacal, acidez estomacal o malestar general.
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