Los trucos caseros cada vez adquieren más popularidad, pues nos ayudan a resolver cosas del día a día y hacernos la vida más fácil, además son muy fáciles de hacer porque sólo requieren algunos ingredientes y muchos de ellos seguro ya los tienes en tu casa, pues son para limpiar o incluso para lavar, tal es el caso de la piedra pómez.
Usualmente se usa para lavar los trastes y quitar el cochambre de las ollas, pero tiene algunos usos más en la cosmética y es que posee grandes propiedades exfoliantes que ayudan a tener una piel muy suave y tersa, por lo que es perfecta para eliminar callosidades y rugosidades de la piel, por que es rugosa y porosa, además se puede reutilizar, siempre y cuando la laves muy bien y la guardes en un lugar ventilado para evitar la proliferación de hongos o bacterias.
¿Cömo usar la piedra pómez para eliminar callos de los pies?
De acuerdo con la Clínica Mayo los callos y las callosidades son capas duras y gruesas de piel que aparecen cuando la piel intenta protegerse de la fricción o la presión. Generalmente, se forman en los pies y las manos, van creciendo cuando tienen más presión, generalmente suelen formarse en los pies por usar zapatos que no calzan bien, en ocasiones también se forman por usar zapatos o tenis sin calcetines, ya que ejercen fricción y la posterior aparición de estas afectaciones en los pies.
La piedra pómez es muy útil para eliminar durezas superficiales de los pies sobre todo de los talones que con el uso de calzado abierto y poca hidratación suelen resecarse y presentar asperezas que pueden limarse con el uso de este mineral. Para poder usarla sin que te lastimes es recomendable que primero dejes tus pies en remojo por al menos 20 minutos en agua tibia con un poco de sal para que se ablanden las asperezas.
Realiza movimientos circulares sobre los talones para eliminar las asperezas, puedes pasar la piedra dos o tres veces con la fuerza necesaria para que puedas retirar la piel de los callos, pero ten cuidado pues ejercer mucha presión puede ocasionarte lesiones o heridas innecesarias. Luego de frotar tus pies con la piedra pómez limpia la zona con un paño limpio e hidrata la zona. Es recomendable que la uses dos veces por semana para evitar lastimar la pies de los pies.
Ten cuidado, pues aunque la piedra pómez es un gran exfoliante no se recomienda usarla en otras zonas del cuerpo como la cara o los brazos, ya que podría lastimar y causar irritaciones. En los pies se utiliza por que la pies es hasta 50 veces más gruesa que en el resto del cuerpo. Si tienes callos que te causan mucho dolor es aconsejable visitar al médico para que revise si es necesario un tratamiento más invasivo.
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