En 2018, María Ariza se convirtió en la primera mujer en dirigir una bolsa de valores en México, trabajo que ha combinado con el rol de mamá de Mercedes y Elena, que son su mayor bendición.
¿Cómo te cambió la vida la maternidad?
Para mí, no ha habido nada más maravilloso que tener a mis hijas. Creo que el mayor cambio tras ser mamá fue el adquirir una enorme motivación para trabajar en ser mejor persona y profesionista.
¿Cómo lograste combinar estos dos roles?
No es nada fácil. La realidad es que ha implicado mucha práctica, una gran coordinación entre todos los que formamos parte de la familia, mucha comprensión y empatía de parte de mis hijas.
¿Qué retos enfrentaste?
A que muchas veces, para lograr un posicionamiento, es necesario poner un gran extra de tiempo y esfuerzo, y esto requiere sacrificios más allá de los horarios laborales.
¿Has pensado en dejar tu profesión y dedicarte al cien a tus hijas?
No, hasta el momento no. Sin duda me gustaría ver más a mis hijas, pero también creo que hemos logrado una muy buena dinámica donde respetamos los espacios familiares.
Para ti, ¿qué representa ser madre?
Es una enorme bendición. Representa mi más grande motivación para dar lo mejor de mí en todos los aspectos.
¿Cuál es tu satisfacción más grande como mamá?
Reconocer en mis hijas una enorme solidaridad y compañerismo ente ellas. Son tan diferentes entre sí en términos de su personalidad y carácter, y me asombra y llena de orgullo verlas ser cómplices.
¿Qué consejo le das a las mamás que quieren seguir con su profesión?
Que se atrevan, aunque tengan miedo. Que confíen en ellas mismas, que armen un esquema de organización, consensuado por la familia, donde cada uno esté de acuerdo, pleno y coordinado. [nota_relacionada id=1014033]
Por Daniela Zambrano
eadp