En un mundo acelerado, encontrar la escapada perfecta para relajarse y recargar energías se convierte en una prioridad, y qué mejor manera de hacerlo que sumergiéndose en el fascinante universo de las películas musicales y es que aunque muchas personas piensen que las historias donde de un momento a otro los personajes comienzan a cantar son aburridas, este toque de música puede dar una nueva vida a las narraciones clásicas.
3 musicales que te harán amar la música
Según los amantes del cine, las películas musicales ofrecen una combinación única de emociones intensas, narrativas cautivadoras y deslumbrantes actuaciones musicales; desde clásicos atemporales hasta producciones contemporáneas, cada filme transporta a las y los espectadores a un mundo donde la música se entrelaza con la trama, brindando un entretenimiento que va más allá de la pantalla, pero si tú aún no sabes con qué musicales comenzar, aquí te dejo tres recomendaciones para pasar horas de diversión.
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The Rocky Horror Picture Show (Jim Sharman, 1975)
Adentrándose en un misterioso castillo durante una tormenta, una pareja se ve atrapada en medio de una extraña fiesta que combina extravagancia, horror y música, mientras avanza la historia cada uno de los personajes participa activamente en rituales en donde el baile reina en cada momento; la obra aborda temas de liberación sexual y diversidad, resonando a través del tiempo y generando una base de seguidores leales y es que, de acuerdo con los expertos, esta cinta es una celebración cinematográfica que desafía convenciones y cautiva a las audiencias con su magnetismo inigualable.
Pitch Perfect (Jason Moore, 2012)
La talentosa e introvertida Beca, interpretada por Anna Kendrick, encuentra su lugar en la Universidad de Barden al unirse a un extraño grupo de chicas con habilidades vocales excepcionales, lo que se convierte en un viaje extraño en donde Beca lidera la transición del grupo hacia un mundo de fusiones musicales, alejándose de la armonía tradicional. Enfrentándose a la competencia en concursos musicales universitarios, las chicas libran una lucha apasionada por el reconocimiento y la autenticidad.
Cry baby (John Waters, 1990)
Considerada quizás como la mejor obra de John Waters, este monumento al pop-rock presenta a un Johnny Depp en su faceta más rebelde, junto a un elenco estelar que incluye a Traci Lords, Iggy Pop y Willem Dafoe. La película, con su inolvidable banda sonora y ambientación, parece ser una comedia musical ligera, pero lleva consigo el distintivo toque atrevido del director. Esta obra se presenta con una mezcla única de humor y seriedad que la consagra como una joya cinematográfica insuperable.
¿Qué es lo que hace que los musicales sean tan amados por los cinéfilos?
Si bien, muchas personas rechazan este género cinematográfico, la realidad es que los musicales tienen un gran número de seguidores, ya que la riqueza de la música, el baile y la puesta en escena convierte cada película en una experiencia sensorial que alimenta la creatividad y la apreciación artística.
De la misma forma, los expertos afirman que la música tiene el poder de influir en nuestras emociones, y los musicales aprovechan este poder de manera excepcional, ya sea una historia conmovedora o un número musical enérgico, estas películas tienen el don de elevar el estado de ánimo y brindar una sensación positiva que perdura mucho después de que los créditos finales hayan rodado.