La siempre recordada chef Chepina Peralta, quien durante años presentó miles de recetas en televisión para el gusto de varias generaciones, no sólo llevó el alimento a la mesa de muchas familias, con consejos y amabilidad que siempre fue su mejor presentación. También llevó sinceridad, honestidad y certeza en sus actos, algo que refrendó cuando declaró, hace dos años, que no buscó ser chef en televisión.
Chepina inició su carrera en 1967 sin saber cocinar ni conducir en televisión. Simplemente tuvo una gran oportunidad frente a sí y tomó la mejor aventura de su vida.
No buscó ser chef
Incluso, Lucía Josefina Sánchez Quintanar, su nombre real, aseguró que no le gustaba cocinar y llegar a esa parte de su vida, hace varias décadas, fue algo que de inicio le perturbó.
"Llegué a un lugar no conocía, que no me gustaba y que no busqué, porque no me gustaba cocinar", así de contundente fue Chepina Peralta cuando declaró para el Heraldo de México, hace dos años, cómo fue su llegada fortuita a la presentación en TV de platillos culinarios.
Comunicar, su primer ingrediente
Maestra de oratoria de profesión, la comunicación fue siempre su mejor enlace para atraer la atención de las personas que, sumidas en su voz, encontraban tranquilidad y confianza en lo que proponía. Fue en es cualidad donde Chepina Peralta halló su primer ventaja para cocinar.
"Yo soy maestra del arte de hablar en público, soy maestra de oratoria", recordó en entrevista para El Heraldo de México en su momento.
Luego de esto, continuó su anécdota: "Un día me habló por teléfono y me dijo mi primera maestra, oye Josefina, ahí todavía no existía Chepina, están buscando a una auténtica ama de casa, más o menos de tu edad, que tenga facilidad de palabra, que sea simpaticona, que se pueda relacionar con las personas. Van a hacer un programa nuevo de televisión, fue el primero de América Latina (de cocina)”, recordó.
Aprendió en el camino siguiendo el guion
Común en el mundo de la TV, el guion marca la pauta de cada conductor. Esto fue igual para Chepina Peralta que, al no dominar el arte de cocinar, pero ya elegida para dar recetas de cocina durante 15 minutos cada día en Telesistema Mexicano, aprendió cada paso a seguir.
Recordó que le ponían un guion, se aprendía las receta, le ponían los ingredientes picados y ella los guisaba como dictaba el papel.
Se ganó al público con simpatía
Chepina Peralta siempre dominó el set. En su momento, si una receta o algo salía mal a cuadro y frente a millones de personas desde sus casas, ella bromeaba casual y seguía su labor. La gente disfrutaba su naturalidad. Ante esto, la gente le enviaba cartas y ella, una por una, las respondía para satisfacer las ganas de la gente de contactarla.
Esto de dio a tal grado, que alguna ocasión ayudó a una esposa desesperada que no sabía cocinar y contaba con un marido muy exigente en la cocina. Chepina, elocuente e inteligente, le aconsejó a cuadro que se consiguiera una cocinera.
Estas y muchas anécdotas más fueron contadas por Chepina Peralta para El Heraldo de México. Disfruta de la entrevista y conoce la visión y emoción de una mujer talentosa que encontró en el arte de cocinar su mejor forma de comunicar con el público.
maaz