CÚPULA

Por una Secretaría de Cultura plural

La secretaria de Cultura Claudia Curiel apunta hacia educación artística, el apoyo a la creación y la articulación de instituciones

EDICIÓN IMPRESA

·
Créditos: FOTOS: AZUL OLVERA

La Secretaría de Cultura es para su titular, Claudia Curiel de Icaza, un todo que hoy, más que nunca, necesita articularse, encontrarse y fortalecerse. Institutos, direcciones generales, escuelas, grupos artísticos, oficinas administrativas, programas y proyectos, infraestructura, todo puede y debe enriquecerse entre sí. En su administración, dice, un área tiene que hacer equipo con otras para ofrecer más apoyos, más espacios, más diálogos, más público, más impacto, para garantizar, de manera más eficaz, el derecho a la cultura. 

Mientras todos los equipos analizan los márgenes de acción y fortalecimiento, Curiel de Icaza ha perfilado algunos de los ejes en lo que ya está trabajando desde el día uno de su gestión: la educación artística, los apoyos a la creación y la vitalidad de la infraestructura existente. 

Además, en entrevista con Cúpula, la funcionaria asegura que tanto el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), como el Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (INBAL) van a ser parte central para los proyectos, pues son los guardianes del patrimonio nacional.

Curiel de Icaza está entusiasmada. De ese entusiasmo hay ejemplos que marcaron su camino por el sector cultural. Por ejemplo, como secretaria de Cultura de la CDMX no sólo puso orden administrativo en la Filarmónica capitalina con jubilaciones históricas, también logró que el grupo grabara dos discos, hiciera giras en alcaldías y tuviera una presentación memorable en el Auditorio Nacional, entre muchas otras cosas. Aquella hazaña la recuerda con júbilo. Ahora, esa energía está en la dependencia federal.  

Foto: (Cortesía Secretaría de Cultura)

¿Qué secretaría encuentras? 

Un espacio fascinante, una Secretaría con un potencial maravilloso que tuvo proyectos muy importantes en esta reciente administración, sobre todo en temas de patrimonio vivo, de trabajo con pueblos originarios y afromexicanos, así como en cuestiones de creación con la transformación del ex Fonca al Sistema de Apoyos a la Creación y Proyectos Culturales, con el que se ha llegado a otorgar becas en muchos estados de la República a donde nunca habían llegado. Y llego a una Secretaría con instituciones alucinantes como el INAH y el INBAL, tienen todo a cargo, todo el patrimonio nacional y con ellas hay muchas oportunidades de fortalecimiento en temas de educación artística como se ha anunciado, porque las escuelas son el corazón del trabajo que se hace también con vocación nacional. Además, casi el 90% de los que son artistas también son docentes y, en ese sentido, es importante fortalecer las escuelas.

 

¿La educación artística será la médula de tu administración? 

Es un punto que me pareció importante, tuve el privilegio de ir a la UNAM, de estar formada en la Facultad de Filosofía y Letras, en Historia, fui parte de la educación pública gratuita de alta calidad, que es transformadora y que cambia la vida, por lo mismo, teniendo a la presidenta de la educación, una luchadora de los movimientos estudiantiles por educación pública, pues coincidimos en tener la mejor educación, queremos que la formación artística también sea un derecho cultural.

Foto: (Cortesía)

¿Harán un diagnóstico de las cosas que se tienen que fortalecer en este tema? 

Ya había un diagnóstico, por eso lo propuse como una parte de los ejes que desarrollaremos, pero hay otro que se echó a andar desde que llegamos con la nueva dirección del INBAL, con Alejandra de la Paz, y con la Subdirección General de Educación e Investigación Artística con Déborah Chenillo; fuimos a las escuelas, ellas ya fueron a todas, nos reunimos con estudiantes, docentes y administrativos para entender, para que nos dieran sus diagnósticos. Va a ser un sistema de trabajo a corto, mediano y largo plazo,  tenemos que seguir reuniéndonos con ellos, diseñando el Plan Maestro de Intervención en infraestructura, en equipamiento, en actualización de planes de estudio, en todo lo que se necesite para actualizar este gran sistema y articularlo, justo como un sistema de educación artística, donde lo no formal o no profesional, como los Semilleros y otras muchas estrategias que hay de Cultura Comunitaria y educación comunitaria, también puedan tener un lazo con la educación formal; somos un mismo sistema y se pueden nutrir uno del otro, no es lo mismo tener sólo la visión formal, profesional, que cuando te abres también al territorio  y a otras formas de compartir el conocimiento para los que no necesariamente van a ser artistas, pero que tienen derecho a tener otro tipo de capacidades y de interacción con la vida, con la sociedad. Queremos amplificar y articular en un sistema fortalecido desde el corazón del INBAL, ampliar las pedagogías con una visión comunitaria, trabajar en los territorios para que haya una transformación de ida y vuelta.

 

¿Consideran ir más allá de lo artístico y plantear, por ejemplo, las industrias creativas?

En ese rediseño de los planes estamos trabajando también con los alumnos,  son los que necesitan levantar la mano en función de lo que creen que no están recibiendo de manera actual y sí, ampliarlo para el tema de cómo pueden trabajar a nivel profesional, prepararlos para cuestiones que abarcan desde cómo audicionar en temas de música, cómo presentar una carpeta de trabajo,  cómo tener herramientas pedagógicas centrales para la docencia,  que es lo que más nos han pedido y, desde ahí, darles herramientas para incidir y poder integrarse al campo laboral, porque si no,  nada más estamos formando, pero hacia dónde van a ir, a dónde van a entrar. Necesitamos generar ese circuito virtuoso de formación e integración a los distintos frentes laborales.

 

Programas como Original y Semilleros, ¿se mantienen como las conocemos?

No, van a tener variaciones, van a crecer.  De hecho, habrá cuatro ediciones de Original y van a ser en distintas partes de la República, para no centralizarlo y para generar otro tipo de mercado y de capacitación en las distintas regiones del país. Queremos apoyar para que se fortalezca la creatividad, la colectividad, el derecho de autor, el respeto a su trabajo, al pago correcto.

Foto: (Cortesía)

Algunos miembros de la comunidad cultural han dicho que en el sexenio pasado el foco sólo estuvo en algunos programas, por eso creen que se tiene que ampliar la visión del sector y de su administración. ¿Qué opinas?

Yo creo que sí se atendió todo. A lo mejor la visibilidad o el foco mediático se dio en un tema que había quedado rezagado por muchos años, que tiene que ver con el patrimonio vivo, con las culturas originarias, pero el tema de apoyo a la creación siguió, se mantuvo igual el tema en el cine.  Ahora lo que vamos a seguir fortaleciendo es el trabajo de la música y las artes escénicas, por supuesto,  con nuevas convocatorias que puedan seguir fortaleciendo ese trabajo como teatro y danza escolar,  que estamos trabajando con el maestro Luis Mario Moncada y con Alonso Alarcón, que son los coordinadores nacionales, con el equipo que hace las convocatorias del ex Fonca,  con el Centro Cultural Helénico y es que estamos analizando que de todo ese pastel son más de 2 mil 300 millones de pesos los que se dan en apoyo a la creación,  entre las distintas convocatorias que tenemos. Más alrededor de mil millones que tiene que ver con los EFIS, que finalmente, aunque sean incentivos, siguen siendo recursos del Estado. 

Son alrededor de 3 mil millones de pesos de apoyo a la creación y analizamos en ese ecosistema los segmentos, es decir, vamos a ver a qué público va, si hacemos más producción que circulación, para equilibrar y potenciar. Por ejemplo, estamos encontrando que falta el apoyo a la circulación para que todo lo que se produce también circule.  

En ese análisis vamos a fortalecer los espacios donde tengamos que balancear ese ecosistema y vamos a retomar con mucha fuerza teatro y danza escolar, y lo que tiene que ver con apoyo a espacios culturales independientes. Además, queremos hacer encuentros nacionales con los estudiantes de las escuelas porque no tienen como los Fonca o los Semilleros, también queremos que en las convocatorias de teatro y danza escolar se consideren a los alumnos y no solamente a las compañías que puedan ser las de siempre. 

 

¿Qué harán con los espacios del Proyecto Chapultepec? 

Básicamente nosotros recibimos la infraestructura.  La responsabilidad ahora es darle vida, abrir esos espacios para las comunidades culturales, contratarlos, que haya espacios de distintos géneros, inclusivo, de jazz, de experimental,  de música popular. Tenemos 11 nodos culturales.  Algunos los opera directamente el gobierno de la Ciudad de México, otros nosotros, pero la idea es trabajar como equipo para que ese gran bosque, que es el más grande del mundo cultural, ahora se palpe con esa vida cultural, desde la Cineteca, Los Pinos, todo lo que se abrió  y es una gran oportunidad para vincular a los artistas,  para darles espacios de presentación y también  de contratación. 

 

¿Mariana Aymerich sigue al frente del Festival Internacional Cervantino? 

Se mantiene en el Circuito de Festivales, pero el Cervantino va a tener otras cabezas de programación.

 

Desde hace tiempo, en el sector cultural se ha apuntado hacia la participación de la iniciativa privada y al mecenazgo. ¿Qué opinas?

Es un trabajo de economía creativa, es una línea también que vamos a desarrollar y fortalecer. Con la Secretaría de Economía vamos a tener más reuniones para implementar este trabajo también de industrias, de economía creativa, con vocación social.

Por Alida Piñon

EEZ