El Gobierno de la Ciudad de México va por recaudar “al menos 100 millones de pesos anuales”, en una “estimación muy conservadora”, con el denominado impuesto verde, que se cobrará a partir de 2025 a todas aquellas empresas que contaminen.
Así lo informó, en entrevista con El Heraldo de México, la secretaria del Medio Ambiente, Julia Álvarez Icaza, quien recordó que esta nueva contribución es para fuentes fijas que contaminen más de una tonelada de bióxido de carbono equivalente (CO2) al mes.
Puntualizó que esta acción gubernamental es bajo la lógica de que “el que contamina, paga, y lo que paga se utiliza para proyectos que reduzcan las emisiones al ambiente”.
Destacó que el primer cobro a las empresas por este impuesto será hasta el 17 de febrero, ya que faltan detalles técnicos que las autoridades analizan con especialistas.
Informó que, por ejemplo, en coordinación con la Secretaría de Administración y Finanzas, estudian el mecanismo de medición de contaminación.
Además, puntualizó que deberán realizar el padrón de empresas que estarán sujetas a esta nueva contribución.
Incluso, detalló que se abrirá un periodo para que las compañías —que tienen conocimiento que contaminan más de lo que marca esta regla— puedan inscribirse de manera voluntaria como nuevos contribuyentes ante las instancias correspondientes.
Puntualizó que los recursos recaudados serán para proyectos estratégicos que disminuyen la emisión de gases de efecto invernadero, lo que permitirá cumplir metas marcadas por la Agenda 20-30.
Expresó que con esto se marca un nuevo paradigma para la CDMX en materia ambiental.
PAL