La paciencia fue virtud. La primera victoria de Cruz Azul en el Clausura 2024 no pudo ser en su estreno dentro del certamen, pero sí en la Jornada 3, por 2-1 ante el sotanero Mazatlán, para devolverle al Estadio Ciudad de los Deportes aquella felicidad por ver a La Máquina pitar.
El cuadro de la capital frenó 241 minutos de sequía, con el tanto de Gabriel Fernandez (16’) y el aumento de la ventaja de Ángel Sepúlveda (40+6’), de notable actuación, con par de asistencias de Uriel Antuna, motor de la ofensiva. Los tres jugadores se fueron entre aplausos de la afición.
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Desde la previa pareció ser un compromiso para el primer triunfo celeste, aunque los sinaloenses llegaban como rival incómodo, con dos triunfos, dos empates y un descalabro ante los cementeros. El estrenó goleador de Gustavo del Prete con Mazatlán (9’), apuntó a un nuevo desliz azul que después se desvaneció, aunque en la segunda parte, en la recta final, el nerviosismo lo puso la visita con su insistencia.
Kevin Mier volvió a ser factor desviando un balón al poste. La seguridad del colombiano contagió a la tribuna que lo vitoreó en cada oportunidad de peligro visitante. En lo que respecta a los otros refuerzos, además del Toro, Lorenzo Faravelli se notó más adaptado en medio campo, pero el contraste lo puso Gonzalo Piovi, desubicado y perdiendo balones en la central. Camilo Cándido ingresó al 85’.
Los locales no sabían ganar desde el 1 de noviembre pasado. Cuatro partidos de liga después volvió a sumar tres puntos. Ese mismo duelo (2-1 ante Juárez), fue la última vez que anotaron sus delanteros (Sepúlveda y Antuna).
Cuatro puntos, de nueve posibles, tiene La Máquina, que se instala a mitad de tabla, con esperanzas de que a media semana, ante Xolos, también de local, llegue otra victoria que acelere su marcha a los primeros lugares, con paciencia y mejoría.