La actualización de cajeros automáticos (ATM) permite no solo reducir gastos, sino llegar a un número mayor de personas y avanzar en la inclusión financiera, consideró Martin Espinel, vicepresidente Comercial LATAM en Auriga.
Refirió que México dentro del ranking de América Latina tiene una buena posición en cuanto es el indicador de por cada 100 mil habitantes cuántos cajeros automáticos, ya que de acuerdo con el Banco Mundial son 62 cajeros por cada 100 mil habitantes adultos mexicanos, mientras que en la región es de 70.
México está cerca del indicador de la región latinoamericana, ubicándose dentro de los seis primeros lugares, agregó.
Dijo que el cajero automático como se conoce a cumple en México 57 años y continúa concentrándose básicamente en la entrega o dispersión de dinero a pesar de ser un canal estratégico.
A decir del especialista, ahora el ATM está llamado a hacer un canal más dinámico en el tema de servicio y atención a clientes, así como de eficiencia para las sucursales.
Apuntó que los ATM no solo deberían entregar dinero, sino operar como una alternativa de liberación de transaccionalidad que se hace en las sucursales, como depósitos, remesas, pago de servicios, entre otros, lo que se conoce como el cashin.
Destacó que un cajero automático tiene más cobertura geográfica y de horario respecto a una sucursal, por lo que los clientes tendrían un mayor tiempo de hacer esas transacciones que actualmente se hacen en horarios de sucursal.
“Con eso le darían mucha eficiencia a la banca tradicional y un mejor servicio a los clientes”, refirió en entrevista con El Heraldo de México.
Según la Comisión Nacional Bancaria y de Valores, 70 por ciento del total de ATM en el país están en manos de los cuatro bancos más grandes del país.
MAAZ
