Petróleos Mexicanos (PEMEX) prevé que, de 2019 al cierre de este año, la estrategia de reducción de costos alcanzará un ahorro de 103 mil 180 millones de pesos, indicó Octavio Romero Oropeza, director general de la empresa productiva del Estado.
Según datos de la petrolera, tan sólo para este 2023 la disminución en el gasto será de 22 mil 887 millones de pesos, mientras que de 2019 a 2022 ahorró 80 mil 293 millones.
“Hemos implementado una estrategia de reducción de costos basada en la optimización de los contratos, de las ingenierías y de las actividades de exploración y producción, lo que ha originado significativas reducciones con respecto a los montos que se tenían en 2018”, destacó el directivo.
Desde 2019 la empresa productiva del Estado ejecutó varias medidas operativas que desde entonces han dejado ahorros que se han invertido en las actividades de exploración y producción, principalmente.
Informes de la petrolera refieren que una de las actividades que más impulsó la disminución del gasto fue la reducción en el tiempo de perforación, pues en el caso de los pozos exploratorios se redujo en 53 días en promedio, dependiendo de la profundidad, y debido a la optimización de los trabajos la renta de equipo y todo el gasto que se requiere disminuyó de manera importante, lo cual también permitió incorporarlos a la producción en tiempo récord.
El director general de PEMEX explicó que la estrategia de reducción de costos forma parte de la excelencia operativa, la cual, además de dejar ahorros monetarios y de tiempo, también ha mejorado los tiempos producción, pues ha acelerado las operaciones de los nuevos pozos.
“Esto es gracias a las prácticas de excelencia operativa que hemos implementado en la extracción de hidrocarburos y que nos ha permitido consolidar la mejora en el perfil de producción”, aseveró el directivo.
Romero Oropeza detalló que la excelencia operativa ha dejado buenos resultados, siendo la perforación de pozos el área en que mejores logros se han alcanzado con esta estrategia, lo que a su vez dio protagonismo a importantes pozos productores pertenecientes a los nuevos campos petroleros, entre los que destacan Quesqui y Tupilco.
Los nuevos campos se han vuelto relevantes, ya que han remediado la declinación de la producción de los campos maduros, y a su ve vez han sostenido la tendencia de crecimiento en la producción de la petrolera, y en lo que va del año, su aportación al total de los hidrocarburos líquidos es de más de 500 mil barriles diarios, esto es cerca de una tercera parte de toda la producción.