FMI recorta pronóstico de crecimiento económico para México a 1% en 2020

El Fondo Monetario Internacional (FMI) recortó su pronóstico de crecimiento para la economía mexicana en 2020 a 1 por ciento, desde el 1.3 por ciento que había previsto anteriormente.

El organismo internacional presentó la actualización de las expectativas de crecimiento para la economía mundial, en el que indicó que este recorte se debe a la debilidad de inversión en México y prevé que para 2021 la economía puede alcanzar un crecimiento de apenas 1.6 por ciento. 

El FMI también modificó su estimación para la región de América Latina desde 1.8 por ciento a 1.6 por ciento, en donde, algunos de los elementos de peso para la menor previsión del crecimiento en la región son la debilidad en México y la revisión a la baja en el pronóstico de crecimiento de Chile.

"Las revisiones se deben a un recorte de las perspectivas de crecimiento de México en 2020-21, entre otras razones por la continua debilidad de la inversión, y a una importante revisión a la baja del pronóstico de crecimiento para Chile, que se ha visto afectado por la tensión social", refiere el documento.

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Brasil aminoró desaceleración de AL

Sin embargo, en sentido opuesto, Brasil es una economía importante para América Latina y aminoró la desaceleración de la región, ya que, “gracias a una mejora de la actitud tras la aprobación de la reforma de las pensiones y la disipación de las perturbaciones de la oferta en el sector minero", mejoró su expectativa de crecimiento.

En lo que se refiere al crecimiento global el organismo redujo su pronóstico de 3.4 por ciento a 3.3 por ciento.

“Para afianzar la actividad económica y prevenir los riesgos a la baja, es indispensable lograr una cooperación multilateral más sólida y una combinación más equilibrada de políticas a nivel de los países, teniendo en cuenta el espacio monetario y fiscal disponibles”, instó el FMI.

Además, destacó que la incertidumbre en torno a las políticas comerciales, las tensiones geopolíticas y la tensión idiosincrásica en las principales economías de mercados emergentes siguieron imponiendo lastres a la actividad económica mundial—en especial la manufactura y el comercio— en el segundo semestre de 2019.

Por Laura Quintero
dzd

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