Soraya Jiménez es una de las mujeres más representativas en la historia del deporte de México, ya que no ha habido una competidora más poderosa que ella en la rama de la halterofilia.
La halterista mexicana fue la ganadora de la medalla de oro en la categoría de los 58 kilógramos después de que logró la victoria en su prueba al levantar un total de 225.5 kgs. y con ello alzarse con la presea dorada.
Ella siempre mostró que a pesar de su fortaleza y sus ganas de triunfar, existían algunos malestares físicos que la acompañaron durante su carrera, lo cuál al final generó algo que hasta cierto punto resultó inesperado.
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Una trágica vida llena de lesiones y operaciones
Soraya Jiménez tuvo que lidiar con muchos problemas de salud, un dopaje que aceptó y que al final fue como el final de su carrera y un total de 14 operaciones que tuvo que realizar en su vida.
Varias de esas operaciones que tuvo que realizarse fueron de las piernas, problemas cardiorespiratorios que ella sufría y que incluso le afectaban en su habla y sus cuerdas vocales y la pérdida de un pulmón debido a que contrajo Influenza Tipo B en el 2007.
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El día inesperado de su muerte
El 28 de marzo del 2013, México vivió uno de los golpes deportivos más dolorosos de la historia, después de que una de sus heroínas había perdido la vida muy joven.
Soraya Jiménez sufrió un infarto agudo al miocardio con lo que al final perdió la batalla y falleció a los 35 años de edad, dejando un enorme legado de historia ganadora, con la que se le recuerda hasta el día de hoy.
Por: Redacción Digital El Heraldo de México
hgm