A dos días de encontrarse en el Maracaná de Rio de Janeiro para disputar la final de la Copa América-2019, el favorito Brasil y el sorprendente Perú preparan la estrategia para quedarse con el codiciado título continental.
Brasil, ocho veces campeón de la Copa América, en 1919, 1922, 1949, 1989, 1997, 1999, 2004 y 2007, ya se encuentra instalado en la Granja Comary, su centro de entrenamientos en Teresóplis, a unos 100 km de Rio de Janeiro.
Perú, dos veces ganador del torneo continental, en 1939 y 1975, ya se entrenó este viernes en la ‘Cidade Maravilhosa’ de cara a la cita el domingo en el Maracaná, que tendrá el arbitraje del chileno Roberto Tobar.
Mantener el ADN brasileño
Para Everton, la revelación de la Canarinha, que está haciendo olvidar al lesionado Neymar en esta Copa América, la clave de Brasil pasar por mantener “el ADN del fútbol brasileño”.
Según dijo ‘Cebolinha’, tanto en el fútbol mundial como en el brasileño “se apegaron mucho al fútbol europeo, estilo táctico, que está fuera de las características de los atletas brasileños, que es el drible, el uno a uno”.
“Entonces, yo trato de hacer eso, que lo hago desde pequeño, que es el ADN del fútbol brasileño”, agregó Everton, que advirtió que la goleada 5-0 que Brasil le aplicó a Perú en la fase de grupos no cuenta de cara a la final del domingo, forma parte del pasado y la Canarinha no puede confiarse.
“Va a ser un juego totalmente diferente. Tenemos que estar preparados para hacer un buen juego”, sostuvo.
Casemiro coincidió con ‘Cebolinha’: “Es una final, no vamos a esperar una goleada, ojalá que se dé, pero sabemos que no será así, será duro, ellos se están preparando bien para la gran final”.
“Va a ser una gran final, un juego muy difícil, no podemos pensar que ya ganamos, hay que jugar. Una final no se juega, una final se gana, no importa como sea”, agregó el aguerrido volante central del Real Madrid.
Gareca, el hacedor del milagro
Para la prensa peruana hay un gran responsable de este éxito: “Gareca: el arquitecto de este sueño”, tituló un medio en Perú.
En cuatro años al frente de la selección inca, el argentino Ricardo Gareca ha tenido “tiempo suficiente para consolidar una idea del juego y llevar a escribir un nuevo capitulo de su historia, pero esta vez compuesta por ilusión y mucha alegría”, destacó el rotativo.
El estado de ánimo en la selección inca está por las nubes.
Y no es para menos, dado que la celebrada victoria ante Chile le permitió a Perú volver a la final del torneo de selecciones más antiguo del mundo tras 44 años de ausencia, pues no disputa el título desde 1975, cuando venció a Colombia 1-0 en el tercer y decisivo partido.
Por: AFP
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