Por: Alberto Aceves/El Heraldo de México
Jugar en la NBA requiere más de cuatro intentos. En la carrera del mexicano Jorge Gutiérrez las cosas resultaron así, desde sus primeras prácticas con los equipos de la liga.
Los últimos en la lista fueron los Portland Blazers, con los que promedió 8.62 puntos y cuatro asistencias, en el pasado torneo de verano. A partir de eso, vinieron comentarios positivos de técnicos y jugadores, aunque nada le hizo quedarse.
"Tenía la esperanza. Sentía que, por cómo estaba jugando, demostré que podía estar en cualquier equipo. Los comentarios me llevaban a eso. Fue decisión de ellos no aceptarme y es parte del negocio. Hay un equipo en Italia que me quiere (el Dolomiti Energia) y que me va a dar los minutos que necesito", menciona, en entrevista con El Heraldo de México.
Su experiencia en la NBA, con los Nets de Brooklyn (2013-14), los Bucks de Milwaukee (2014-15) y los Hornets de Charlotte (2015-16), ha ofrecido a Gutiérrez nuevos conceptos, no sólo en cuestión del juego.
"Ser parte de la NBA es presión por todos lados. Involucra muchos millones de dólares. Lo dinámico sólo es el juego, pero hay más alrededor. Es 50 por ciento físico y 50 mental. Si algo falla, repercute en seguida. Cada partido es una experiencia nueva, que te ayuda a madurar. Antes no tenía esta paz para seguir jugando. Me siento libre, mucho más maduro. Yo empecé viendo la NBA por Michael Jordan, aunque no siempre se podía", complementa.
Antes de viajar a Italia, Gutiérrez será parte de la Selección Mexicana, en la próxima Copa FIBA Américas.
"Estamos unidos, hemos trabajado bien en los últimos cuatro años. Los resultados se darán en cuestión del trabajo. En un futuro, sueño con volver a la NBA", concluye.
Miércoles 15 de Enero de 2025