La noche de este miércoles 17 de marzo se dio a conocer el fallecimiento del pintor y escultor de origen español pero nacionalizado mexicano Vicente Rojo Almazán, tan sólo algunos días después de haber celebrado su cumpleaños número 89.
Vicente Rojo es reconocido como un destacado artista del Programa Pago en Especie desde 1976, al que contribuyó con 51 obras, destacando en la pintura, escultura y el diseño gráfico.
En México Rojo recibió importantes reconocimientos como el Premio Nacional de Ciencias y Artes, el Premio México de Diseño y la Medalla al Mérito en las Bellas Artes. En 1998, la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) le otorgó el doctorado Honoris Causa.
En España en 2006 le fue otorgada la Condecoración de la Encomienda de la Orden de Isabel La Católica y en el 2011 el Instituto Nacional de Bellas Artes le entró la “Medalla Bellas Artes” por su trayectoria en las artes visuales.
Su llegada a México
Vicente Rojo nació en Barcelona en 1932, fue en esta ciudad donde estudio escultura y cerámica. Luego llegó a México en 1949 por su padre que residía como refugiado político, y fue aquí donde estudió pintura y tipografía, para exponer sus obras por primera vez en 1958 con gran éxito y abriéndose paso en el arte y cultura del país.
Es uno de los artistas más importantes del abstraccionismo en el país, adscrito a la generación de la ruptura. Su obra se ha presentado en exposiciones del Museo Universitario de Ciencias y Arte, en la Universidad de Texas, Museo de Arte Moderno y en la Biblioteca Central de Madrid, por mencionar algunas.
Su pintura se agrupa en cinco series principales: “Señales”, en la que se trabaja formas geométricas; “Negaciones”, que tenía la intención de que cada cuadro negara al anterior y al que le seguía; “Recuerdo”, inspirada en el intento de abandonar una infancia complicada; “México bajo la lluvia”, del día que vio llover en Tonantzintla, y “Escenarios”, miniseries donde repasa temas de sus obras anteriores.
Con información de medios
cvg