De paso por Finlandia y con compromisos en los teatros más importantes de Moscú, Palermo, Sevilla y algunas ciudades de EU, el tenor Arturo Chacón Cruz (1977) regresa a México, pero ahora vestido de charro. El sonorense dejará atrás la formalidad de las salas de concierto para presentarse por primera vez con mariachi, en el célebre palenque de la Feria de Texcoco.
Las rancheras, dice a El Heraldo de México, “son la música que me trajo a la ópera, que me despertó la inquietud por cantar”. No llegaba a los 15 años de edad cuando, en la ciudad donde creció, Chacón se unió con un grupo de amigos para dar serenatas: “A veces por 200 pesos o lo que nos dieran, hasta 50 pesos, cantar y dar serenatas era nuestro pago”, cuenta.
Con 42 años y después de pisar escenarios como El Bolshoi y la Scala de Milán, el tenor ya no teme a las críticas de aquellos que exigen a un belcantista permanecer fiel a las grandes salas. El año pasado se estrenó en el género ranchero con el disco De México para el Mundo (Sony Music) y dice que está en uno de los mejores momentos de su carrera: “Siento el control completo de mi voz, la voz más calurosa y fuerte”.
El sonorense debió esperar para cantar la música de su tierra: “Cuando comenzaba, la gente con la que trabajaba me prohibió hacer conciertos con mariachi a pesar de tener invitaciones. Me decían: 'no, es que se van a confundir los teatros, van a pensar que eres un cantante que no está de lleno en la ópera, te vas a quemar', como decimos en México". Su promotor en Latinoamérica, Manuel Vera, le ha conseguido participar el 15 de abril en el escenario texcocano que han pisado otras figuras populares como Juan Gabriel o Los Tigres del Norte.
Chacón, como cualquier otro mexicano, lleva una playlist grabada: “La primera que me llega a la mente es 'Mujeres divinas', la cantábamos mucho, siempre estaba ahí; y claro, 'Por tu maldito amor', porque sufrimos mucho el desamor. De ahí, las más viejitas como 'Cielito lindo', que se cantaba en casa con mis papás y cada que voy la cantamos aunque sea con la guitarra”.
La seguridad ha sido la clave para el cantante; ahora, cuenta, aborda “papeles más fuertes que están llegando con facilidad. Hay menos titubeo, cuando cante Idomeneo, a los 25, por ejemplo, entré con la seguridad que te da esa edad, pero yendo hacia atrás, esa seguridad y la inocencia de no saber que es un papel tan difícil, me salvó. Ahora voy consiente de la dificultad de los papeles, pero también seguro de que sé lo que hago”.
Este año, Chacón cumplirá 20 de su debut en el Palacio de Bellas Artes, pero aún no hay planes para volver a la sala. Fuera tiene cerrado Un baile de máscaras y Las vísperas sicilianas, de Verdi, en Palermo; Carmen, en Finlandia; La Traviata, en Moscú, Verona y Sevilla; Los cuentos de Hoffman, en España e Italia y Werther, de Massenet y, La Boheme, de Pucciini, en ciudades de EU.
[nota_relacionada id=823705]POR LUIS CARLOS SÁNCHEZ
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