En medio del dolor y la angustia, familiares de los cinco jóvenes desaparecidos desde el pasado 11 de agosto en Lagos de Moreno, Jalisco acudieron a la misa que se realizó en el templo la Merced ayer por la tarde-noche.
Las lágrimas se hicieron presentes cuando se nombró una larga lista de desaparecidos y es que, en Lagos de Moreno, no solo faltan cinco, son muchas familias las que sufren al no saber nada de algún ser querido y que han sido víctimas de la violencia.
“Habrá escuchado en alguna ocasión mi testimonio, saben que yo fui también víctima de secuestro y no una vez sino dos y ya siendo sacerdote y me decían, pero como, no es posible ni porque era padre, lo respetaron, si a Jesús no lo respetaron”
Sacerdote
Algunos familiares de otras personas desaparecidas cargaban las fotografías de sus seres queridos y las abrazaban con la ilusión de algún día volver a reencontrase.
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