“La vida sin amor de un padre es la carga mas grande para un hijo”, Brené Brown, autora best seller de LOS DONES DE LA IMPERFECCIÓN, EL PODER DE SER VULNERABLE y MÁS FUERTE QUE NUNCA. Y es que como madres tendemos a ponernos siempre en ultimo lugar como si este sacrificio fuera una insignia de honor, a menudo abandonándonos a nosotras, a nuestros deseos, sueños y amor propio. Todo esto con un gran precio que sin saberlo lo pagan aquellos a quienes mas amamos: nuestros propios hijos. ¿Pero, ellos nos pidieron que fuéramos infelices? ¿Que dejáramos nuestros sueños? ¿O fue un acto voluntario? Y sincerándonos bien, ¿que es lo que escondemos o a que no nos queremos enfrentar cuando excusamos la renuncia a vivir nuestra vida por “cuidar” a los hijos? Porque mi querido lector yo veo madres con hijos de 20 años que dicen seguir cuidándolos y que por eso no pueden hacer tal o cual cosa. Esto no se trata de criticar, se trata de crecer. ¿Como puedes tu llenar a alguien si por dentro estás vacío? Para dar, necesitas tener que dar. El cuidarte a ti primero es el acto de amor propio mas grande que existe, solo una persona feliz, llena y plena puede ser así con los demás y brindarles lo mejor. Amarte no es un capricho millonario, ni egoísmo, ¡es casi un servicio a la comunidad!
Me acuerdo cuando cuando mis hijas eran chicas ir a la escuela y ver a estas mamás totalmente desarregladas, greñudas y casi con lagañas criticando a las mamas que como yo trabajábamos, ya habíamos hecho ejercicio y estábamos bien vestidas como si esto significaba que éramos ineptas o malas madres, hasta nos daban indirectas. Hoy 20 años después, todo sigue igual, los hijos siguen nuestro ejemplo mas con lo que ven que con lo que escuchan y me da gusto ver que mis hijas se levantan a las 6 am, antes de ir a trabajar para hacer ejercicio, arreglarse e ir comerse el mundo.
Si tengo que decir que es cansado, que hay que ser organizadas y hay que priorizar, como lo dije en mi articulo pasado “La realidad de ser una mujer multitask”, pero lo digo y lo sostengo, nutrirte y cuidarte debe ser prioritario.
Es un hecho psicológicamente comprobado que como te sientes te ves y viceversa, como te ves te sientes. ¡Has la prueba! Un día que te sientas anímicamente fatal arreglate, vístete muy bonito, maquillate y peinate. Verás que automáticamente se te subirán los ánimos y los de todos a tu alrededor. Existen otras formas de cuidarte y llenarte. A veces puede ser difícil cuando tienes bebes en casa o hijos pequeños, pero no es imposible. No estoy diciendo que ignores a todos y te vuelques en ti. Tal vez para ti el cuidarte significa meditar, o hacer yoga, tal vez leer un rato. Debes procurar darte estos espacios para ti de vez en cuando y pedir ayuda si es que la necesitas, el hacerlo no te hace ser peor mamá. AL contrario, regresaras con mas animo y ganas. Cuando nos cuidamos a nosotros mismos muchos aspectos de nuestra vida incluidas nuestras relaciones se ven beneficiadas.
Recuerda que si a una planta le das demasiada agua la puedes ahogar.
PAL