Las redes sociales pueden llevar a cualquier persona a cometer locuras por el simple hecho de querer sus “cinco minutos de fama”; sin embargo, el caso de una joven podría convertirse en uno de los más emblemáticos, curiosos y lamentables por convertirse en “viral” a través del Internet.
Y es que, hace unos días, una chica causó gran furor en la web gracias a un video en el que se observa cómo toma un bote de helado del refrigerador de un supermercado en Estados Unidos, lo destapa y le pasa la lengua por encima, para posteriormente cerrarlo y dejarlo en su lugar.
El material audiovisual se hizo viral en cuestión de minutos; sin embargo, a la empresa Blue Bell —marca del ‘mantecado’ en cuestión— no le causó nada de gracia y pidió a las autoridades y a los encargados de la tienda dar con el paradero de la joven.
Fue así como las investigaciones arrojaron que el video se había filmado el 28 de junio pasado, cerca de las 11 de la noche, en una sucursal de Walmart ubicada en el pueblo de Lufkin, al noreste de Houston, Texas.
Aunque aún se desconoce la identidad o paradero de esta joven, se espera que las imágenes registradas por la cámaras de seguridad ayuden a encontrarla más rápido y poder emitir una orden de arresto y, de ocurrir, las leyes de Texas serán severas.
El manipular productos de consumo es un delito que se paga con una multa de hasta 10 mil dólares y aproximadamente unos 20 años en prisión, al menos así lo afirma la CBS.
“La manipulación de alimentos no es una broma y no vamos a tolerar que alteren nuestros productos. Agradecemos a todos los consumidores que nos alertaron del hecho y nos suministraron información”, dijo la compañía de helados en un comunicado, en donde también detalló que sus productos se sellan herméticamente, por lo que los consumidores se darían cuenta cuando un envase haya sido abierto.
Por otro lado, Walmart aseguró que retiró de la tienda todos los envases de helado cremoso de vainilla con chispas de chocolate y cacahuates tostados cubiertos con chocolate negro, de la marca Blue Bell, como una medida de precaución para sus clientes.
Y, en cuanto a la joven, parece que solo es cuestión de tiempo para que enfrente a las autoridades, quienes decidirán el castigo de acuerdo con las leyes en Texas. Todo por unos minutos de “reflectores”.
Por REDACCIÓN DIGITAL EL HERALDO DE MÉXICO