Activistas y artistas realizaron una marcha, con estilo de una procesión fúnebre, por la vaquita marina, que se encuentra al borde de la extinción, ya que quedan menos de 30 ejemplares.
Entre tambores y campanas, cientos de personas encabezadas por una persona portando un cráneo tallado de la vaquita se llevó a cabo la "Procesión en Honor a la Vaquita Marina", ritual colectivo que partió del Museo Tamayo al Museo Nacional de Antropología en la zona de Chapultepec.
El propósito es reflexionar sobre el destino de esta especie, única en el mundo y que se encuentra en peligro de extinción y que no tomar cartas en el asunto, el ejemplar podría desaparecer en un lapso de tres años, a decir de Rodrigo Medellín, investigador del Instituto de Ecología de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
La ceremonia solemne es un urgente llamado a la sociedad para participar en la conservación de muchas especies de plantas y animales que se encuentran en situación precaria en México y en el mundo.
https://www.youtube.com/watch?v=kAikrIbHatI
Además hubo un performance del artista y conservacionista mexicano Patricio Robles Gil, quien creó una escultura alusiva, pieza fundamental de la ceremonia en honor de la vaquita. El fragmento simbólico de la pieza estará en el Museo Nacional de Antropología, donde se integrará a la escultura y se podrá observar por el público.
https://twitter.com/museo_sancarlos/status/964922519378636801
Afuera del museo se colocará una pintura alusiva a la Vaquita, realizada por William Cheper, donde la gente podrá depositar arreglos florales. La ceremonia terminará con una obra musical compuesta por Mario Lavista.