Territorios Palestinos.- Diana Babish entra en una jaula de un refugio cercano a Belén en medio de ladridos de perros que se abalanzan agitando la cola en busca de una caricia.
Dirige Beit Sahur, algo así como un santuario para estos animales en los Territorios Palestinos donde la población suele desdeñar a los canes.
Babish tiene unos cuarenta años y viste y se maquilla como cuando estaba a la cabeza de una agencia bancaria, sector en el que trabajó dos décadas.
La falta de conocimientos veterinarios no le ha impedido abandonar su profesión para dedicarse a estos seres peludos que la rodean.
Son una cuarentena, blancos, leonados, negros, con las orejas caídas, de pelo largo o corto. Algunos parecen cariñosos, otros miran al visitante con recelo. No tienen pinta de haber tenido una vida fácil.
Los animales son maltratados en los territorios palestinos pese a ser criaturas de Dios", dice Diana Babish.[caption id="attachment_87086" align="aligncenter" width="1024"] FOTO: AFP[/caption] Desde su apertura hace 18 meses en las colinas rocosas de Cisjordania, la perrera atendió a 130 canes adultos y 200 cachorros con la ayuda de organizaciones extranjeras como la Fundación Brigitte Bardot. Diana Babish los alimenta y ha aprendido a ponerles inyecciones y a prodigarles los cuidados básicos para curar las heridas infligidas por las personas. También los prepara para la adopción. Un promedio de dos perros encuentran amo cada semana, a menudo en Israel pese al conflicto israelo-palestino.