Melania Trump, su pasado como modelo y el gusto por prendas de vestir costosas hacen que proyecte más una imagen de celebridad que de una primera dama preocupada por causas sociales.
“Transmite y proyecta; desde la campaña se pudo ver mucha más distancia y menos empatía (que Michelle Obama) y, al final, la empatía es lo que genera la cercanía, el cariño o incluso la admiración por parte de la gente”, explicó a El Heraldo de México, Maryan Iglesias García, experta en Imagen Pública.
Melania, una ex modelo de 47 años, 24 menos que su marido Donald Trump, ha sabido explotar su imagen bien conservada y su buen gusto para vestir. “Sabe que tiene una figura excepcional para su edad, incluso de la cara no revela su edad, y ella, evidentemente juega mucho con esta carta”, explicó Iglesias.
A pesar de los looks y estilos distintos que ha mostrado la primera dama norteamericana, ella muestra una tendencia por el color blanco y la melena suelta “lo cual no es una casualidad, sino más bien, una estrategia, de su equipo, de sus asesores.”
Las prendas blancas y de colores muy claros transmiten transparencia, apertura “es un color más juvenil, tiende a hacer ver a la gente más joven que los colores más oscuros por su carga de formalidad y sobriedad excesiva”, mientras que el pelo suelto es un elemento de sensualidad a su imagen.
CON OTRO SELLO
Iglesias García explicó que el papel de la primera dama estadounidense será muy diferente al de su antecesora. “Va a ser más una primera dama-celebridad que una mujer de causas”.
Michelle Obama, una abogada y activista, impuso su sello "verde" en la Casa Blanca; bajo la bandera de una sana alimentación. En 2009 creó un huerto para proveer de verduras orgánicas a su familia.
Lanzó la iniciativa Let’s Move (A moverse) para reducir la obesidad infantil y Let ´ s Girls Learn (que las niñas aprendan), un esfuerzo para ampliar el acceso a la educación de las niñas en todo el mundo. Apareció en shows televisivos ejercitándose y hasta rapeó con Missy Elliot.
“Melania no va por este mismo camino. Es carente de causas por la gente”, pero no será una primera dama gris, aseguró Iglesias. Melania tuvo un arribo desangelado a la Casa Blanca: no se mudó a la par de su marido, lo hizo cinco meses después para que su hijo Barron terminara sus estudios en Nueva York, lo que despertó dudas sobre su papel.
Poco se sabe de los cambios hechos por ella en la residencia presidencial. Recientemente anunció el cambio de mayordomo, que ahora será el antiguo director de habitaciones del Hotel Trump International en Washington.
El papel de Melania probablemente sea el de respaldar los dichos de su marido, “en los temas en los que ellos radicalizan y polarizan, ella se va a mantener; desde la campaña ella defendía todas las posturas y las torpezas, las declaraciones torpes o agresivas que promovían la violencia y el racismo del señor Trump, Melania siempre estaba de su lado”.
Para la analista en imagen política, la señora Trump es una mujer inteligente, “sabe muy bien qué le corresponde decir y por dónde moverse”.
Sobre los constantes manoteos que se han hecho virales entre Melania y el presidente de Estados Unidos, y de los que la prensa ha especulado, Maryán Iglesias dice creer que ambos están inmersos en una relación de conveniencia.
POR ALEJANDRA MARTÍNEZ
ALEJANDRA.MARTINEZ@HERALDODEMEXICO.COM.MX
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https://youtu.be/0s5RPXOdpaw “Yo me atrevería a decir que es una relación de conveniencia y que los dos juegan un rol; los dos saben muy bien cuál es su papel y aprovechan muy bien las ventajas propias. Donald Trump le da estatus, dinero, fama, hasta frivolidad o este papel de celebrity, y ella también juega muy bien sus cartas. “Muestra una imagen femenina, fuerte, poderosa, es una mujer que está empoderada. Es una relación estratégicamente bien plantada, de conveniencia.”