Amazon es una empresa tan grande que además de tener plataforma de video y tienda online, tiene otros servicios como renta de servidores para almacenar archivos, plataforma de música y también un motor gráfico para desarrollar videojuegos llamado Lumberyard que actualmente se ha vuelto más popular debido a una de las cláusulas que incluye su contrato.
Este motor contiene todas las instrucciones rutinas y demás herramientas para que las personas dedicadas a la programación lo aprovechan y puedan crear diversos programas de computadoras, o cualquier otro dispositivo. Por esta razón es que Amazon tiene una serie de cláusulas especificas en las que señala los casos en los que no se puede hacer uso de este software.
Dentro de las cláusulas se especifica explícitamente que no puede ser usado para dispositivos de uso médico, vehículos autónomos, naves, sistemas dedicados al control de tráfico aéreo, o incluso algo más extremo como misiles u otros dispositivos de uso militar.
Sin embargo, como en todo proyecto hay excepciones y reglas, es precisamente que en la cláusula 42.10 del contrato de uso de Lumberyard específica que todo esto antes mencionado no aplica si comienza una infección viral transmitida por fluidos o picaduras que haga que los cadáveres humanos revivan y quieran comer carne humana.
Dicha excepción debe cumplirse al pie de la letra, para que las personas dedicadas a la programación puedan hacer uso de este motor gráfico para los fines, previamente mencionados, que no están permitidos. De caso contrario Amazon está en todo su derecho de proceder con una acción legal.