Definitivamente, el enamoramiento entre dos seres humanos ha cambiado con los años; no importa el tipo de pareja.
Es muy común escuchar a tus amigos decir: “Conocí a mi novia por Facebook”, “Gracias a Instagram, mi ligue y yo quedamos de salir”, o hasta: “Me caso con la mujer que conocí por Twitter”.
La oleada de modernidad tecnológica ha llegado también al amor, pero así como puede tratarse de una linda historia, puede acabar en sesiones de llanto, que bien podrías ahorrarte, si antes de formalizar la relación te propones conocer mejor a esa persona, pero a la de la vida real.
La fórmula es muy sencilla, muchas relaciones inician y terminan a través de las redes sociales y el proceso es el mismo: se conocen por Tinder, se agregan a Facebook, se siguen en Instagram y se mensajean por WhatsApp, pero de acuerdo con el especialista y conferencista Gabriel Arana, las relaciones amorosas ahora son más virtuales que reales y tiene sus pros y contras, ya que así como ayudan a que los introvertidos puedan comunicarse más fácilmente con alguien que les gusta, poco a poco se pierde la habilidad de desarrollar relaciones sociales. Y una vez que has conseguido lo que buscas, hay que tener cuidado, pues si ponemos atención a las cifras no favorecerán a tus objetivos.
Al menos el 13% de los enamorados han sido infieles con alguien que conocieron en redes sociales. ¿Qué te parece? Y es que es muy fácil, que cualquiera puede tener acceso a conocer personas afines.
Otro punto negativo de conocer a alguien por redes sociales o alguna aplicación para ligar es que muchas veces las fotos llevan un gran trabajo de Photoshop, por lo que no puedes saber si al menos físicamente es real, así como si se trata de una persona sociable, divertida, educada, entre otros atributos. Los especialistas dicen que el amor y las redes sociales no se llevan, porque al tratar de combinarlos, puede que la relación se vuelva más conflictiva que romántica.
Quizá podría parecer un argumento de tía solterona, pero existen infinidad de estudios que demuestran que las redes sociales tienen una influencia negativa en las relaciones estables de pareja, al provocar celos, inseguridad, acoso y, sobre todo, mucha confusión. Con base en un estudio de Badoo (web especializada en hacer que dos individuos se conozcan), un usuario común de internet pasa más tiempo socializando en las redes que frente a frente. Por ello, uno de cada tres prefiere utilizar los medios digitales que contactar personalmente al elegido.
“Todo el mundo tiene la necesidad de conocer gente, lo que en el pasado significaba hacerlo físicamente. Hemos vuelto ese proceso más eficiente. Cuántas oportunidades no se perdían como cuando uno veía a una desconocida llamativa cruzar la calle”, dice Sean Rad, quien junto a Justin Mateen, crearon Tinder, la app con mayor demanda para conseguir pareja. Los detractores de esta aplicación no creen que sus aspiraciones sean tan buenas, y la acusan de ser una herramienta para quienes solo buscan sexo casual sin compromiso, pero eso dependerá de cada quien. Un tema importante para aquellos que pretenden buscar el amor por esta vía es que no se ilusionen.
Es muy común hacerlo mientras se espera un nuevo mensaje de alguien que seguramente chatea con otras 10 personas casi al mismo tiempo. ¿Y a ti cómo te va en la feria?
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POR HÉCTOR FULE
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