En el transcurso de esta semana nos enfrentamos a dos posicionamientos irreductiblemente tontos. Por un lado la 4T de Morena y sus aliados se mantuvieron empujando una Reforma Judicial mediocre y sin sustancia, que de ninguna manera resuelve el grave problema del Sistema de Justicia en nuestro país. Por el otro para variar, la oposición rasgándose las vestiduras en contra de la citada Reforma.
Mientras, el país entero como testigo de palo observándolos medio matarse, y en el fondo por nada. Porque ni Andrés Manuel López Obrador con su Reforma al Poder Judicial realmente esta incidiendo en la crisis del Sistema Judicial del país. Ni los que están oponiéndose a partir de solo argumentar que estamos cayendo en una dictadura plantearon nada que pudiera mejorar la situación de la justicia en México.
De nada han servido las diarias reuniones de Seguridad Pública a las 6:00 am con el Presidente de la República, la cacareada Guardia Nacional, ni los centenares de elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional.
Muestra de ello, fue que desde el lunes pasado la población sinaloense se vio totalmente sitiada, en medio de una guerra desatada entre “los mayos” y “los chapitos” que se ha ido extendiendo a prácticamente todo el Estado a raíz de la detención de Ismael “El Mayo” Zambada, sin la intervención de la Guardia Nacional y la absoluta incapacidad del gobernador Rubén Rocha Moya de brindar seguridad a los ciudadanos, y sin que el Senado de la República iniciara el procedimiento para declarar la desaparición de poderes en Sinaloa.
Pero vayamos por partes.
Podemos decir que López Obrador planteó la Reforma Judicial por venganza o porque estaba seguro de que había corrupción. Sin embargo, la razón es lo de menos, la realidad es que ningún Ejecutivo Federal en los últimos 60 años, con excepción de Ernesto Zedillo, se había atrevido a sacudir aunque fuera un poquito al Poder Judicial, por un malentendido respeto a la autonomía entre Poderes.
Eso, en el fondo provocó que el Poder Judicial fuera totalmente opaco y quedara en manos de un conjunto de familias como la de Olga Sánchez Cordero que hicieron del Poder Judicial y de la Justicia en México un enorme negocio, tanto a nivel federal como a nivel local, porque lo mismo sucede en los 32 Estados de la República.
Podemos argumentar y con razón, que las ocurrencias de Andrés Manuel López Obrador para resolver los problemas del país no son las adecuadas. ¿Pero del otro lado cual ha sido la propuesta alternativa?
Porque hasta el momento en que López Obrador comenzó a sacudir al Poder Judicial la sociedad mexicana no tenía la menor idea de lo que estaba pasando adentro. Entonces cuando lo hace comenzaron a salir víboras, arañas, sapos, lombrices, y un montón de realidades.
Tan es así que de último momento la Ministra Presidenta de la Corte Norma Piña presentó una “Reforma Integral al Sistema de Justicia en México desafíos y propuestas” que en una de sus páginas (115), presenta un comparativo de relaciones familiares en órganos jurisdiccionales, confirmando los argumentos del Presidente de la República.
Conclusión, López Obrador tiene razón.
Cierto es que de ninguna manera eran las formas, y tampoco la Reforma Judicial es un proyecto que resuelve el problema. Sin embargo que bueno que lo hizo. Porque la realidad es que existe un gravísimo problema de impunidad que es urgente atender (lo estamos viendo en Sinaloa, que tan solo es la punta del iceberg), y que de no haberlo hecho él, gracias a un malentendido respeto entre poderes, nadie se hubiera atrevido ha hacerlo.
Pero del otro lado sin dimensionar la crisis en función de la sociedad, los todavía dueños de los tres partidos de oposición MC, PAN y PRI, en automático y sin analizar la situación a fondo, sobre todo, sin proponer una alternativa que resuelva la crisis del Sistema de Justicia en nuestro país, se manifestaron en contra atendiendo solamente a sus compromisos y agendas personales, demostrando su falta de visión y talento.
Indudablemente el PAN desde Diego Fernández de Ceballos para abajo esta totalmente comprometido con el Poder Judicial y con los intereses de sus abogados. Por parte del PRI, pues andan mas ocupados en la ratificación de la reelección de Alito quien por su parte no tiene la menor idea de como fijar una postura seria. Dante Delgado que de lo que sabe es de publicidad y propaganda, en realidad nunca se metió de lleno al tema para construir una propuesta integral y sistémica al Sistema de Justicia, sin importarles que en términos del documento de la Ministra Norma Piña casi el 40 por ciento del los miembros del Poder Judicial tienen relaciones de familia dentro del Poder Judicial, sin prestar atención, ni por parte de la oposición ni del oficialismo, al rezago que hay en la atención de los asuntos del Poder Judicial. Por respeto a la “división de poderes”.
Ante esto, permítanme afirmar, que dentro de los males, que bueno que con la Reforma Constitucional aprobada le han abierto la puerta a la sociedad y podrá meter la mano al Poder Judicial.
Que bueno que la sociedad va a poder participar con sus mejores mujeres y hombres por encima de las relaciones familiares en la construcción de un Poder Judicial verdaderamente autónomo. Que bueno que el Consejo de la Judicatura no lo va a presidir la Ministra o Ministro Presidente de la Corte, llámese Norma Piña, Arturo Saldivar o Lenia Batres. Porque entre ellos solo se cubren. Lo mismo sucede a nivel nacional como local. Que bueno que habrá instancias como el Tribunal de Disciplina Judicial donde tenemos que hacer que la sociedad participe.
Pero no es suficiente.
Tenemos que seguir erradicando en el corto plazo el nepotismo. Además, debemos obligar a los próximos jueces, magistrados y ministros que sean electos a rendir cuentas, a comunicar el criterio de sus sentencias, y a polemizar en los argumentos a través de los cuales se sustenten sus decisiones.
Se tiene que transparentar el Poder Judicial. A diferencia de lo que ha venido haciendo Andrés Manuel López Obrador con el Poder Ejecutivo, quien para evitar rendir cuentas ha resguardado toda la información por cuestiones de “Seguridad Nacional”. Lo mismo se tiene que hacer con el Poder Legislativo, porque están eliminando los Órganos Autónomos encargados de la Transparencia y la Rendición de Cuentas. La pregunta es ¿y donde esta el ciudadano? ¿Donde queda la democracia ? Porque lo que estamos viendo es pura democracia de discurso.
Lo que pretendo alertar, es en la importancia de que la Academia, los Colegios de Abogados y los expertos en lo personal puedan comenzar a intervenir en la construcción del paquete de Reformas y Leyes Secundarias en materia de Justicia que obligadamente tendran que implementarse a lo largo de los siguientes seis años.
Porque la Reforma Constitucional aprobada no es suficiente. Hay que prepararse de inmediato para la Reforma al Sistema de Seguridad Pública y de las Fiscalías, porque con lo que contamos actualmente es una completa simulación, en el discurso las llaman autónomas pero en realidad dependen de los Gobernadores, como lo pudimos constatar recientemente con Sara Bruna Quiñones en Sinaloa.
Lo mismo sucede con el Fiscal Federal Alejandro Gertz Manero (que esperamos siga con vida), cuyo vocero Andrés Manuel López Obrador se dedico a justificar y cubrir su ausencia ya que en los últimos seis años no se le ha visto en ninguna de las reuniones diarias de Seguridad con el Presidente a las 6 de la mañana.
Por eso lo que sigue es abordar la Seguridad Pública con trabajos serios de investigación, involucrando a la sociedad para que participe en estos procesos. Es terrible que la sociedad permanezca inerme ante una policía local totalmente infiltrada por la delincuencia.
Como podemos observar, de nada sirvieron las diarias reuniones Seguridad donde AMLO solamente se “desmañanaba” para que le dieran el parte de muertos y simular que al levantarse de madrugada trabajaba eficientemente. No señor.
Evidentemente el señor de Macuspana nunca tuvo la menor idea de como hacer investigación criminalistica, de como detonar operativos estratégicos y lo que hizo fue poner en manos del Ejército la construcción de una pseudo policía federal que en realidad fue una extensión del Ejército, ampliando unicamente sus áreas de poder con una Guardia Nacional.
Urge profesionalizar e invertir importantes recursos en la Defensoría, que sin duda serán muchísimo menos de los que tiraron en la construcción de el AIFA, el Tren Maya, en el despilfarro en Dos Bocas, y en la Farmaciototota. Porque ademas esto, si tendrá un impacto real en la población.
Lo que sigue es que como sociedad, cada quien desde su trinchera nos involucremos en el cambio de la Justicia en México, los Abogados desde su ámbito de especialidad jurídica, la Academia desde la revisión de los procesos, los Medios de Comunicacion exigiendo que el Poder Judicial reporte, y los Ciudadanos en Observatorios de Justicia de carácter local, estatal y nacional.
Dejemos a un lado el duelo y veamos la oportunidad ¡sí hay salida!
Con la Reforma Constitucional aprobada ya nos abrieron la puerta aprovechémosla. Sin duda se trata de un enorme reto. Pero hagamos que quienes nos representen en el Poder Judicial tengan la experiencia y el nivel de preparación judicial con la calificación mas alta y rindan cuentas.
Porque hoy, hoy no sabemos que esta pasando en el Sistema de Justicia en México.
Y no es pregunta.
POR MARTHA GUTIÉRREZ
@MarthaGtz
Vocal del Consejo Directivo Del Instituto de Política y Gobernanza, A. C.
MAAZ