Predecir el futuro en materia de conflictos internacionales puede ser un desafío casi imposible de lograr con certeza. Sin embargo desafortunadamente lo que sí puedo adelantar es que el escenario es desalentador. Según la trayectoria de los acontecimientos en este último año 2023, en el que la pandemia quedó atrás y se generó una recomposición en el tablero internacional, en varias regiones seguirán sonando las alarmas, y el 2024 marcará desafíos globales trascendentales.
Los 2 conflictos que seguirán marcando el nuevo año son:
1-. La continuación por tercer año de la guerra entre Ucrania y Rusia por disputas territoriales, particularmente en Crimea y el este de Ucrania. Hasta hoy el reporte de este conflicto es que Rusia mantiene un discurso ganador y Putin se posiciona con un 85% de aprobación en su país que alimentan sus intenciones de reelección. Ucrania ha tenido altas y bajas, ahora se encuentra en una situación complicada pues, aunque inició negociaciones con la Unión Europea para su incorporación no será inmediata, incluso podría tomar años,, y el paquete económico de Estados Unidos sigue detenido por los republicanos, quienes insisten en endurecer las leyes fronterizas estadounidenses antes de aprobar más ayuda a Ucrania y habrá que sumarle el factor electoral estadounidense. El tiempo se agota y la paz está aún lejos de lograrse.
2-. El renovado conflicto entre Israel y el grupo militar Hamás, con más de 30,000 muertos, tomó más fuerza y convirtió nuevamente a la región en el foco principal para el siguiente año. No solo la situación de pobreza y la hambruna acechan, sino que hay nuevos actores involucrados como lo son Irán quien se ha convertido en el aliado principal de Hamás, y Qatar, Egipto, y países africanos que se involucran cada vez más. El conflicto, no solo territorial, sino político y religioso, volverá a impactar a muchas generaciones.
Además de nuestros actores ya conocidos como Estados Unidos, Unión Europea, y Rusia tenemos dos actores que serán claves en la nueva geopolítica mundial:
3-. El actor estrella seguirá siendo China, no solo por su intención de tomar Taiwán para su reunificación, su tensión con Filipinas sobre reclamos territoriales en el Mar de China Meridional, y con Estados Unidos por el mercado económico; sino por su influencia en temas ambientales, de inteligencia artificial, y su política exterior pues lleva todo el año intensificando sus reuniones y posicionando su visión de reconfiguración del orden mundial. Así como India quien ha tomado, no solo el primer lugar por ser el país más poblado del mundo, sino por considerarse la más grande democracia del mundo y el segundo mercado más grande después de China. Su prioridad está enfocada en el desarrollo económico y social. Debemos reconocer que ambos líderes cuentan con una aprobación de sus ciudadanos muy alta, China con 90% e India con el 75%, y que esto hará que tengan un papel determinante en la historia mundial.
Por último, tenemos dos acontecimientos que no debemos soslayar y que estarán en la mira de todos los países en el 2024.
4-. La elección de Estados Unidos. Hasta el momento, quedan todavía 13 aspirantes en la lucha por llegar a la boleta. Pareciera que entre más cargos se le imputan a Trump más puntos le da el electorado, pues se mantiene a la cabeza frente a los demócratas con un 63.1% de acuerdo con los sondeos de FiveThirstyEight, y los juicios aun no terminan. Por su parte, Biden deberá enfrentar la investigación de su juicio político por ayudar a su hijo y a otros familiares en supuestos negocios irregulares, su popularidad va a la baja, y sus propuestas de ley cada vez están más debilitadas.
Para México este tema es, además de nuestras propias elecciones, una prioridad pues los temas de migración y fentanilo marcarán la agenda política de las siguientes administraciones.
5-. Por último, y esta noticia realmente no la podemos controlar, es que los desastres naturales seguirán en el 2024, como lo fue en el 2023 con los terremotos en Turquía y Siria, Marruecos, la inundación en Libia, el terremoto en Afganistán, las olas de calor en Australia, Canadá, Hawái, Italia e India, la sequía en el Amazonas, el paso de huracanes, la explosión del volcán de Islandia e Indonesia, entre muchos otros. El cambio climático seguirá presente en la agenda internacional el siguiente año.
El 2024 será un buen escenario para plantearnos cuestionamientos a analizar, ¿Qué pasará con la OTAN?, ¿Se mantendrá la estabilidad en los países europeos? ¿Tomará más fuerza el conflicto en Siria? ¿Se agudizará la crisis humanitaria en Yemen? ¿Resurgirán en África las tensiones étnicas, políticas y relacionadas con los recursos naturales? ¿Qué pasará en Venezuela? ¿Qué nuevas soluciones al tema migratorio estarán en la mesa?
PAL
Es importante señalar que el panorama geopolítico global es muy dinámico y que pueden surgir nuevos conflictos o soluciones a los existentes debido a diversos factores como cambios políticos, cambios económicos, movimientos sociales o intervenciones diplomáticas.