Esta es una frase que en reiteradas ocasiones ha mencionado el presidente Andrés Manuel López Obrador y la ha catalogado como la máxima del hampa del periodismo. Se refiere a las noticias y publicaciones de algunos medios de comunicación que son falsas y que tienen por objetivo dañar la imagen de él, su familia o su gobierno. De hecho, un famoso publicista aseveró que la fórmula para ganarle al Presidente y a su partido es fabricando mentiras.
Los detractores del Presidente han hecho de todo, utilizando imágenes o videos viejos sacados de contexto, con declaraciones a modo, acusando sin presentar pruebas, fabricando montajes y en general, utilizando cualquier estrategia con propósitos politiqueros. Hay varios ejemplos que muestran lo anterior, como la publicación sobre la fábrica de chocolates de sus hijos, el supuesto conflicto de interés por la casa de uno de ellos, el despido masivo de médicos y enfermeras, las acusaciones que el país es un narcoestado o que existe un pacto del gobierno con el crimen organizado, entre otros.
Al respecto, el Programa Universitario de Estudios sobre Democracia, Justicia y Sociedad Tlatelolco Lab de la UNAM, reveló una campaña de manipulación para tratar de vincular al partido Morena con el narcotráfico en los días previos a las elecciones de este año. En la campaña para difundir este supuesto pacto participaron periodistas, políticos de oposición y medios de comunicación que no ofrecían ninguna prueba sobre sus dichos, sólo decían que se trataban de inferencias.
No son nuevas las estrategias que se utilizan para tratar de descalificar al gobierno y a las personas que forman parte del gabinete del presidente, por eso no se extraña que en días recientes le tocará al secretario de Gobernación, Adán Augusto López. El pasado martes al salir a conversar con integrantes de colectivos feministas y de madres de mujeres desaparecidas, quienes habían mantenido un plantón afuera del Palacio de Cobián, el secretario tuvo un intercambio con una madre de una persona desaparecida, quién le reprochaba la falta de confianza.
El video que circula en la red, de 38 segundos, no refleja lo ocurrido, que finalizó con un acuerdo de la madre para que la atendiera un funcionario de la Secretaría. A diferencia de lo que han señalado en las redes, el secretario nunca mostró desinterés con la persona.
Desde su llegada a la secretaría, Adán Augusto López se ha convertido en un interlocutor que ha llevado la relación con gobernadores, presidentes municipales, el Congreso, líderes empresariales y organizaciones sociales. Ha mostrado sensibilidad a la hora de llegar a acuerdos para resolver problemas. Prueba de ello es el compromiso a resolver el problema de la escasez del agua en Nuevo León, con el Plan Comprometidos por el agua de Nuevo León, para darle solución. El secretario es uno de los perfiles más activos del gobierno, por eso los ataques que recibe, aunque bien le pueden aplicar las palabras que ha dicho el presidente López Obrador “siempre hemos salido de la calumnia ilesos”.
POR ARTURO ÁVILA ANAYA
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